Juan Luis Arsuaga: "Una de las grandes preguntas de la especie humana es por qué duele el parto"
Aimar Bretos entrevista al paleoantropólogo y codirector de la Fundación Atapuerca
Madrid
¿Por qué estamos aquí? Es la pregunta que se hace el ser humano desde hace generaciones, siglos, y es la pregunta que lleva décadas haciéndose el paleoantropólogo, codirector de la Fundación Atapuerca y director científico del Museo de la Evolución Humana en Burgos, Juan Luis Arsuaga. Entre las múltiples preguntas que todavía existen sobre el ser humano, su evolución y su futuro, el paleoantropólogo propone una sobre la que vierte varias reflexiones: ¿por qué duele el parto? "Ahora sabemos que está ligado a la evolución. Somos mamíferos muy encefalizados y el canal del parto es más estrecho que en otros primates porque somos bípedos", sugiere.
Juan Luis Arsuaga, paleoantropólogo
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El ser humano y sus preguntas
Habría que empezar con por qué nos hacemos preguntas. Ya que nos hagamos preguntas nos convierte en una especie única. Por qué estamos aquí no es una pregunta científica. Igual que hacemos preguntas míticas, filosóficas, también nos preguntamos por qué sale el sol todas las mañanas, lo que llevaría a formular una teoría científica sobre los ciclos solares. Todas esas preguntas nos las hacemos solo nosotros. Y la pregunta metafísica de fondo es por qué estamos aquí. Los científicos nos preocupamos más por cómo funciona el mundo. La pregunta de por qué estamos aquí tenía una respuesta religiosa hasta Darwin, hasta hace un siglo y medio, que es cuando se resolvió a nivel científico. Ahora la respuesta científica es la evolución.
¿Qué probabilidades había que una especie desarrollase una civilización tecnológica? Pues muy pocas. Son una serie de pasos, de umbrales que hay que ir cruzando y cada uno se fue pasando o no. Quizá el más importante fue la aparición de las células complejas. Pero es que eso llevó 2.000 millones de años. Se puede creer en la utopía porque es realizable. Va a ser muy difícil que salgamos de la Tierra, sería mejor que vayamos pensando en eso, para no dejar de afrontar los retos. Si uno piensa que nos vamos a ir no vamos a estar comprometidos con la defensa de este planeta. Es muy difícil que haya un planeta a tal distancia del sol como para que se dé la vida.
¿Quién dominaría el mundo si no estuviera el ser humano?
Si el ser humano no estuviera en la Tierra, el planeta estaría dominado por una especie social, de hecho ya lo hace. La vida empieza en el agua, aquí y en cualquier sitio, a partir de cierto momento empieza a colonizarse la tierra. Lo que vamos viendo es que hay muchas líneas evolutivas en muchas direcciones, pero aquí hay especies que viven en sociedades complejas. Desde hace unos 70 millones de años los invertebrados dominantes son las hormigas, las termitas, las abejas, en fin, los insectos sociales. Cabe pensar que ser capaz de formar una sociedad compleja te da ventaja. Los vertebrados también. Nosotros, los primates en general, pero también por ejemplo los elefantes y les va muy bien. Y en el mar los delfines.
La evolución humana
Es posible que nuestra evolución haya condicionado la de otras especies. Por ejemplo, se dice que los chimpancés se han hecho tan forestales precisamente para evitarnos a nosotros. Podría ser que ellos se han especializado en un tipo de hábitat en el que nosotros no estamos. Cada especie ocupa un nicho y al hacerlo excluye a otras especies de dominar ahí. Las especies divergen y evolucionan de manera divergente.
Para empezar el homo sapiens, que es el último, podría no haber existido. Nuestros antepasados no eran una especie con una gran capacidad de impactar en los ecosistemas, tenían una gran creatividad, pero ni eran más abundantes, ni más importantes que los leones de las cavernas o que los osos o los ciervos. El gran cambio se produjo con la invención de la agricultura y la ganadería, que no es un fenómeno biológico. De todas formas creo que se hubiera producido de todas formas.
¿A qué punto de la evolución se trasladaría?
Yo me trasladaría por ejemplo hasta la llegada del homo sapiens a Europa. También me dirigiría a un neandertal y haría el siguiente experimento, muy simple, me llevaría la mano al pecho y le diría "Juan Luis, soy Juan Luis" y si él hiciera lo mismo y se pusiera un nombre pues serían como nosotros. Tendrían un yo.
Todos los días me asombro. El ser humano es una especie muy desconocida. Ha permanecido desconocido básicamente hasta la llegada de un anatomista en el siglo XVI, el ser humano se ha estudiado muy tarde y como se ha estudiado de manera aislada.
Las preguntas que subsisten sobre el ser humano
Tengo tantas preguntas sobre el ser humano que no podría resumirlas. Por ejemplo, yo hice mi tesis sobre la evolución del parto, ¿por qué duele el parto? La respuesta bíblica es que es una maldición. Ahora sabemos que no y que tiene que ver con la evolución. En los primates en general el parto es muy ajustado, doloroso, porque somos unos mamíferos muy encefalizados, tenemos una gran cabeza, junto con los otros mamíferos sociales. En cualquier mono se presenta este problema, la cabeza es grande, el canal del parto, las caderas, son normales, y además el recién nacido tiende a nacer bastante espabilado. El mono no hace nidos. Tiene que parir un feto que tenga un desarrollo suficiente, hay que apurar al máximo. En la especie humana se suma que nuestro cerebro es mayor, nuestro desarrollo es lento y además las caderas son más estrechas porque somos bípedos.
La inteligencia artificial
En general el ser humano desarrolla tecnologías muy especializadas, no creamos inteligencias generales, se podría decir cínicamente que para eso tenemos a otros humanos. Tenemos una inteligencia general y el tipo de máquinas que producimos están muy especializadas. Ahora las cosas han empezado a cambiar un poco porque si uno le da instrucciones diferentes aprende. La IA está muy presente en nuestro mundo. Los algoritmos son muy importantes para todo y tenemos que pensar si mejoran o no nuestra vida.
El ser humano del futuro
Tenemos capacidad de cambiarnos a nosotros mismos. Así que va a depender de nosotros. Si pudiéramos mejorarnos lo que tendríamos serían brazos más duros, que es lo que la gente va a hacer al gimnasio. En contra de esas profecías de que en el futuro tendremos toda clase de artefactos, yo lo que creo es que sería mejor que tuviéramos abdominales. Es que nosotros nos gustamos así, el ideal griego, el sueño de todos es ser eternamente jóvenes, no vivir para siempre, pero no es el ideal ser eternamente viejos, sino eternamente jóvenes.
Víctor Olazábal
Subdirector de Hora 25. Antes fue corresponsal en India para diversos medios españoles. Especializado...