La 'coronafobia', el miedo excesivo a contagiarse: "Afecta más a mujeres de entre 20 y 40 años"
Los efectos sobre la salud mental que ha traído consigo la pandemia del coronavirus incluyen una psicopatología consistente en un miedo excesivo y constante a contagiarse que llega a interferir de forma permanente en la vida de quien lo sufre
La Ventana a las 16h | La 'coronafobia', el miedo excesivo a contagiarse: "Afecta más a mujeres de entre 20 y 40 años"
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Madrid
Los efectos sobre la salud mental de las personas son una de las consecuencias más importantes que ha traído consigo la pandemia del coronavirus. Este término engloba una considerable cantidad de dolencias psicológicas que han aparecido a raíz la crisis sanitaria. Una de ellas es el miedo excesivo y permanente a contraer el virus, una situación complicada de delimitar y definir que ha adquirido el nombre de ‘coronafobia’.
José Antonio Galiani, director del Centro Psicosanitario Galiani de Sevilla, ha explicado en La Ventana que esta fobia “no es diferente del resto de fobias específicas” Es decir, presenta cuatro bloques de síntomas: “síntomas cognitivos, en los que se englobaría la obsesión por contagiarse o los pensamientos de muerte; síntomas emocionales, como la angustia, la ansiedad y el estrés por tener ese contagio; síntomas anímicos, cuando uno tiene una degradación en su estado de ánimo e incluso síntomas depresivos; y síntomas psicosomáticos, como la opresión en el pecho, la dificultad para respirar o el insomnio”.
¿Ansiedad justificada o coronafobia?
Pero, ¿dónde se encuentra el límite entre la preocupación natural y lógica por contagiarse y la obsesión o la fobia? En palabras de Galiani, “la psicopatología no es cualitativa, sino cuantitativa”. Es decir, “lo importante es la intensidad de la frecuencia y la duración de esa sintomatología. Cuando me genera una interferencia significativa en mi vida diaria estaríamos hablando de una entidad psicopatológica a la que hay que prestar atención”.
Por otro lado, no todas las personas tienen la misma propensión a sufrir esta fobia. Algo que Galiani resume diciendo que “se tienen que juntar el hambre con las ganas de comer”. “Los factores de vulnerabilidad, tener un sistema de creencias propenso a lo psicopatológico, y otros factores de riesgo asociados a una personalidad vulnerables” son, en su opinión, claves. “La relación entre esos factores y una fobia de este tipo es clara para acabar sintiendo esa sensación”, explica.
El papel de los medios
Sobre el papel de los medios de comunicación en el fomento de este tipo de obsesiones, Galiani trae a colación el término “infoxicación”. Es decir, la intoxicación por exceso de información que, según sus palabras “puede menoscabar y lastrar a la mente mejor formada”, “Sería una buena idea dar las noticias sin que siempre tengan la derivada del Covid. Están ocurriendo otras cosas en la vida. Es importante que los medios tengan un papel en la salud mental de la población”, añade.
Del mismo modo que no todas las personas están igualmente expuestas a sufrir este tipo de dolencia, las que lo sufren pertenecen también en su mayoría a grupos sociales concretos. “Hay estudios que han determinado que esta psicopatología afecta más a mujeres de entre 20 y 40 años que pasen por esta situación solas”. “Las relaciones socioafectivas son muy importantes”, explica, “y es una derivada a tener en cuenta a la hora de analizar por qué nos sentimos tan mal”.