Internacional

Clinton y Gore piden el voto para Kerry en la convención demócrata

Duras críticas a la política económica y exterior de la Administración Bush

El ex presidente de EEUU, Bill Clinton, ha desatado el entusiasmo de la Convención Demócrata, en una intervención en la que ha atacado con inteligencia al Gobierno de George W. Bush y ha defendido con ardor al candidato a la presidencia, John Kerry. También el ex vicepresidente Al Gore, ha pedido el apoyo para Kerry. El candidato demócrata necesita estos apoyos porque no acaba de despegarse de Bush en las encuestas, a pesar de que el presidente de EEUU no pasa por su mejor momento.

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Clinton ha insistido en la idea de que Bush ha dividido al país, ya que ha aprovechado el capital político y la unidad nacional creadas tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 "para tratar de llevar el país demasiado a la derecha".

El ex presidente ha recordado la época de prosperidad y seguridad lograda en los ocho años de su Gobierno, y la ha puesto en contraste con la actual situación del país: enfrentamientos con los aliados internacionales, déficit presupuestario, recortes en programas sociales y pérdida de puestos de trabajo.

Respecto a la política exterior, Clinton ha destacado que, al contrario que ha hecho Bush, debe actuarse en cooperación con otros países dentro de un mundo cada vez más interdependiente, porque "no podemos matar, encarcelar o invadir a todos nuestros adversarios".

GORE, CONTRA LA POLÍTICA ECONÓMICA

El discurso de Al Gore ante los más de 5.000 delegados demócratas reunidos en convención en Boston (Massachusetts) ha sido especialmente crítico con la política económica de la Administración Bush ("causante de un déficit público de 500.000 millones de dólares y mucho empleo precario"), y su actuación en materia internacional, sobre todo en Irak.

El candidato demócrata a las elecciones presidenciales del año 2000 ha hecho un llamamiento para evitar la abstención, recordando la situación generada en las anteriores elecciones y por ello ha subrayado que en estos comicios "cada voto cuenta".

Además de abogar por la unidad de los electores demócratas, Al Gore ha reclamado el voto de los republicanos asegurando que la pérdida de liderazgo de EEUU y la política económica desarrollada por Bush "no era lo esperado del candidato que votaron" y de simpatizantes "de terceros partidos", aludiendo a los potenciales votantes de Ralph Nader (Partido Verde). "A ellos les digo que hay diferencia entre la política de los republicanos y los demócratas".

"Asegurémonos de que en las próximas elecciones el presidente no lo elige el Tribunal Supremo y de esta forma aseguraremos que el Tribunal Supremo no será elegido por el presidente de Estados Unidos", ha concluído.

Por su parte, Jimmy Carter, presidente entre 1977 y 1981, ha pedido también el voto para John Kerry, contraponiendo su brillante carrera militar frente a los controvertidos antecedentes de servicio militar de Bush. Carter ha señalado que él también fue un marine. "Pero entonces se cumplían órdenes de otros presidentes que servían a su país con honor y ejercían moderación y no nos lanzaron a la guerra", se ha lamentado.