Hugo Chávez inicia hoy su visita a España con un tumultuoso homenaje a las víctimas del 11-M
El viaje oficial, de tres días, se centrará en los aspectos económicos y en el relanzamiento de las relaciones con España
Madrid
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha rendido hoy homenaje a las víctimas del 11-M en la madrileña estación de Atocha nada más llegar a España para una visita oficial de tres días, en la que se entrevistará con el jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, y con varios líderes políticos, empresariales, sindicales y de diversas instituciones. El acto conmemorativo ha quedado convertido en un tumulto al romper los cordones policiales los numerosos seguidores de Chávez y parte de la prensa de este país, lo que provocó caídas, empujones y hasta robos.
Más información
A las 15,15 horas, Chávez, al frente de la delegación venezolana y acompañado por el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, hizo su entrada por las escaleras de Atocha para bajar hacia el lugar donde se rinde homenaje a las víctimas del atentado del 11-M, en el "Espacio de Palabras".
Algo menos de 200 personas, venezolanos y simpatizantes españoles de Chávez, le esperaban en ese vestíbulo con numerosas pancartas y los gritos y consignas a favor del presidente arreciaron a su llegada, al tiempo que algunas de estas personas comenzaron a cortar el cordón de seguridad.
A duras penas, la comitiva pudo llegar al lugar donde se había extendido un libro para que pudiera dejar sus palabras de condolencia, siempre seguido por varios equipos de televisiones venezolanas, lo que provocó la indignación del resto de medios de comunicación, que no podían acercarse tanto e no podían ver lo que sucedía.
GRITOS, EMPUJONES Y CAÍDAS
Como los diferentes cuerpos de seguridad -Policía Nacional, vigilantes de seguridad de Atocha y los escoltas de Chavez- no retiraban a los cámaras venezolanos, el resto de periodistas se saltó también el cordón de seguridad. A partir de ese momento, mientras continuaban los gritos a favor del presidente, de América Latina y en contra de la política norteamericana, los empujones y caídas se sucedieron.
Sobre las 15,40 horas, Chavez y el resto de la delegación iniciaron la marcha hacia el exterior, entre continuas muestras de entusiasmo y de estrechamiento de manos. A un fotógrafo le arrebataron un objetivo y a un cámara de
Atlas un vigilante de Atocha le lastimó la mano al intentar evitar que se acerca más a Chavez. Éste estuvo a punto de suspender su gira por España y otros cuatro países debido al asesinato del fiscal venezolano Danilo Anderson el pasado jueves.