Trasladados a Madrid los cuatro terroristas islamistas detenidos en Lanzarote
En los registros se ha encontrado abundante documentación en árabe
Madrid
Los cuatro presuntos terroristas islamistas detenidos ayer en la isla canaria Lanzarote han sido trasladados esta tarde a Madrid en un avión militar fletado por el Ministerio del Interior, según han informado fuentes de la lucha antiterrorista. En el aparato, que ha aterrizado sin incidentes en la base aérea de Getafe, han viajado los más de 50 agentes que han participado en la investigación y que llevaron a cabo las detenciones y los registros. Los detenidos pasarán a disposición judicial previsiblemente el próximo martes.
Los presuntos terroristas han sido trasladados hacia Canillas, tras pasar para reseña por el centro policial de Moratalaz.
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Los agentes que han viajado con ellos son miembros de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional y del grupo de especialistas en desactivación de explosivos (TEDAX) que han participado en la operación. En esos registros que practicaron los agentes se encontró abundante documentación en árabe, disquetes de ordenador con información y cartas, material que será analizado en la sede de la Comisaría General de Información en Madrid.
UNA OPERACIÓN CONJUNTA
La operación, dirigida por los jueces de la Audiencia Nacional Juan del Olmo y Baltasar Garzón, ha permitido la detención de cuatro personas supuestamente vinculadas al Grupo Islámico Combatiente Marroquí (GICM), integrado en el Movimiento Salafista Yihadia, vinculado a Al Qaeda, y al que se atribuye la autoría de los atentados del 16 de mayo de 2003 en Casablanca (Marruecos).
Uno de los detenidos, Hassan El Haski, se encuentra presuntamente implicado en los atentados del pasado 11 de marzo en Madrid, y sobre él pesaba una orden de busca y captura dictada por el juez Del Olmo.
Los otros tres arrestados, Ali Fahimi, natural del Sáhara; Brahim Atia El Hammouchi, nacido en Marruecos; y el imán de la mezquita de Puerto de El Carmen, Abdallah Mourib; estaban constituyendo junto al primero una base logística del GICM en las islas Canarias, adonde se habían refugiado tras las detenciones de miembros de este grupo en Francia y Bélgica, según informó ayer el Ministerio del Interior. Mourib compartía piso con El Haski y se cree que también enseñanzas y entrenamiento en campos terroristas, mientras El Hammouchi trabajaba junto al presunto líder de la célula canaria.
