Abbas viaja a Gaza para exigir a las milicias respeto al alto el fuego

El presidente palestino, Mahmud Abás (Abú Mazen), viaja a la franja de Gaza hoy a fin de exigir a las facciones armadas que respeten el cese del fuego, después del bombardeo ayer con más de 40 proyectiles de mortero y cohetes contra asentamientos judíos.

Hasan Abu Libdeh, secretario del Gabinete Palestino, manifestó que "Abás viajará a Gaza para dejar claro que no tolerará las violaciones del alto el fuego", acordado con el primer ministro israelí, Ariel Sharón, el pasado martes en la localidad egipcia de Sharm el Sheij.

La escalada de ayer llevó a Abu Mazen a cesar en sus funciones a una veintena de oficiales de seguridad por no cumplir sus órdenes, entre ellos el jefe de la Seguridad Pública, Abdel Razek Al-Mayaida. Según Abu Libdeh, Abás ha "tomado medidas de castigo contra los oficiales que no cumplieron sus responsabilidades, lo que ha derivado en los últimos acontecimientos en Gaza".

El presidente palestino convocó ayer una reunión de emergencia del Comité Central de Al-Fatah para debatir sobre los últimos bombardeos de los asentamientos judíos, en la que el principal movimiento político palestino declaró "la alerta general y el estado de emergencia entre las fuerzas de seguridad".

Al-Fatah considera el bombardeo un intento por parte de las facciones de "minar la autoridad de la ANP y sus compromisos internacionales". "La ANP confrontará estas provocaciones, estos intentos de dar a Israel la excusa para evadir sus compromisos de la cumbre de Sharm El Sheij", dice el comunicado.

Israel ha anunciado que por el momento se abstendrá de responder al bombardeo ante la decisiva postura del presidente palestino en esta crisis. No obstante, el viceministro de Defensa, Zeev Boim, manifestó hoy en unas declaraciones a la radio pública que "el margen de maniobra (de Israel) es cada vez más estrecho".

El bombardeo fue la respuesta del movimiento islámico Hamás y de los Comités Populares de Resistencia a la muerte de un militante, el miércoles, cuando se acercó con otros tres individuos al asentamiento de Atmozná y el Ejército abrió fuego contra ellos. El jueves, el Ejército israelí mató en Cisjordania a otro palestino, un ladrón de coches, según la edición electrónica del diario "Haáretz".