Uno de los detenidos de ETA quería atentar con un rifle oculto en una funda de raqueta
Preparaba el atentado para esta misma semana
Javier Pérez Aldunate, presunto miembro 'liberado' de ETA (a sueldo de la banda) detenido el pasado viernes por la Guardia Civil en Basauri (Vizcaya), planeaba cometer un atentado esta misma semana, antes del 20-F, según la información que manejan los investigadores. Entre sus objetivos se encontraban concejales del PSOE y del PP de Guipúzcoa y Vizcaya.
Más información
- Prisión para el presunto etarra relacionado con los zulos de la banda
- Tres detenidos por su presunta relación con ETA en el País Vasco y Navarra
- Detenidos dos monjes bendictinos en Guipúzcoa y Francia por su presunta relación con ETA
- Detenido cerca de la Audiencia un ex diputado y etarra huido en 1989
- Catorce detenidos por su relación con el aparato de captación de ETA
- La policía sospecha que ETA tiene a dos personas estables en Madrid
- ETA hace estallar un coche bomba cargado con unos 30 kilos de explosivos en Madrid
La investigación señala, tras el registro llevado a cabo en la localidad de San Miguel de Basauri, que Pérez Aldunate iba a utilizar para sus crímenes un rifle marca Thompson de calibre siete milímetros con mira telescópica y desmontado en tres piezas -cañón, culata con pistolete y guardamanos- para facilitar su transporte en una funda de raqueta de tenis.
No es la primera vez que ETA utiliza este método, ya que ha matado a guardias civiles y trató de matar al Rey con un rifle de gran precisión. El liberado pretendía apoyarse para atentar en dos miembros 'legales' (no fichados) de ETA, uno es López de Aberasturi, detenido en Alicante el sábado y otro que está en paradero desconocido.
En el domicilio registrado se ha encontrado también una pistola de fabricación china de nueve milímetros parabélum con la numeración borrada y sistutuida por la inscripción "ETA 2002". Además había temporizadores idénticos a los utilizados por ETA y detonadores eléctricos para la fabricación de explosivos, lo que lleva a los investigadores a pensar que se podrían haber cometido más atentados.
La operación sigue abierta y no se descartan nuevos arrestos.