Burela despide a los marineros del 'Siempre Casina'

Esta mañana han tenido lugar en Burela los funerales civiles por los marineros muertos en el naufragio del buque 'Simpre Casina'. El mal estado de la mar ha obligado a los buzos a suspender las tareas de búsqueda de los dos tripulantes que continúan desaparecidos.

La iglesia de Santa María de Burela se ha quedado pequeña para acoger a todos los vecinos de la localidad lucense en la que vivían los ocho tripulantes del buque naufragado el pasado martes, 22 de febrero. El frío y la fuerte granizada que cae en la zona no ha impedido que a los funerales asistan familiares y amigos, además de los psicólogos, personal de Salvamento Marítimo y miembros de la cofradía.

En los actos no han estado presentes los cuerpos de los dos senegaleses muertos, ni sus familias han entrado al templo religioso, por respeto a su credo musulmán.

A los actos también han asistido numerosas personalidades, entre ellas la ministra de Pesca, Elena Espinosa y el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras. Espinosa ha transmitido a las familias y a todo el sector pesquero, el pésame y cariño del Gobierno.

Mientras, el mal estado de la mar en la ría de Viveiro, donde está fondeado el buque, ha obligado a los buzos a suspender las labores de búsqueda de los dos marineros todavía desaparecidos. Se cree que el peruano José Luís Peña se encuentra en el interior del barco, por lo que los buzos tratarán de localizarlo en medio de la madeja de redes y aparejos, en una operación que puede llevarles todo el día, si el mar se tranquiliza.

Las autoridades de Salvamento Marítimo han ampliado a más de 800 millas la zona de rastreo, por mar y aire, para localizar al patrón del barco, cuyo hijo, el único superviviente hasta el momento, le vio saltar en el momento del naufragio.