Elegido Papa el conservador Joseph Ratzinger, que se llamará Benedicto XVI

Roma ya tiene obispo. En la cuarta votación, los 115 cardenales reunidos en cónclave en la Capilla Sixtina se han puesto de acuerdo en el nombre del sucesor de Juan Pablo II. Y han apostado por escorar su iglesia aún más a la derecha de la sociedad, eligiendo al cardenal alemán Joseph Ratzinger, que se llamará Benedicto XVI.

Minutos antes, el humo blanco salía de la chimenea del Vaticano a las 17:50 indicando que había nuevo Papa. No obstante, todo ha sido confusión. El humo no era claro: para unos negro, para otros blanco. Las campanas de la Basílica de San Pedro no han sonado hasta las 18:05, confirmando así: Habemus papam. de

Si el objetivo era que no ocurriera como en 1978 cuando fue elegido Juan Pablo I, cuando el humo salido por la chimenea anunciando la fumata blanca fue de tonalidades grises, desconcertando a miles de fieles, la misión no se ha cumplido. La confusión se ha apoderado de todos los presentes en la Plaza de San Pedro.

Minutos después, acudían a San Pedro miles de fieles procedentes de todas las partes de Roma y peregrinos llegados a la capital italiana durante estos últimos días.

Los pasos siguientes

Según el ritual, era el propio el Cardenal Decano, Joseph Ratzinger el que debía pedir su consentimiento al elegido en nombre de todo el Colegio: "¿Aceptas tu elección canónica para Sumo Pontífice?".

Después se le habrá preguntado: "¿Con qué nombre quieres ser llamado?". Ratzinger ha respondido: Benedicto XVI. Después el Maestro de Ceremonias ha levantado acta.

En ese momento, los cardenales se han arrodillado ante el nuevo Obispo de Roma. Entonces, se ha asomado desde la logia de las bendiciones, el balcón central de la Basílica de San Pedro, donde ha sido presentado al mundo.

El 265 Pontífice de Roma

Minutos antes, como marca la tradición, el cardenal protodiácono, el chileno Jorge Medina Estévez, ha cumplido su tarea de hacer el anuncio oficial del nombre del 265 Pontífice de la historia de la Iglesia Católica: "Annuntio vobis gaudium magnum Habemus Papam".

Después, Ratzinger, ya Benedicto XVI ha pronunciado sus primeras palabras a los fieles y ha impartido la bendición Urbi et Orbi, a la ciudad de Roma y todo el mundo.