Ibarretxe pide "discreción" ante el envio de cartas de ETA a empresarios navarros

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, se ha referido al envío de cartas de ETA a empresarios navarros -sólo una de ellas con la fórmula de extorsión tradicional-, afirmando que "estos mismos días están saliendo a la luz pública debates sobre los que hay que ser extraordinariamente discretos porque afectan a la seguridad de las personas". Por su parte, fuentes de la investigación trabajan ahora con la hipótesis de que esta misiva de extorsión sea una carta extraviada o antigua.

Ibarretxe cree que no se deben generar debates sobre temas que ha calificado de "muy sensibles para la propia ciudadanía y sus colectivos, como son los temas de seguridad". Por ello, pidió que "nos comportemos responsablemente" porque "estos son temas que hay que tratar con muchísima discreción, con muchísimo tacto".

Para el lehendakari, el alto el fuego debe hacerse para que "no tenga vuela atrás", por tanto, debe tener el carácter "universal", incluyendo el fin de las extorsiones.

Se trabaja en la hipótesis de que sean extraviadas

Por su parte, la investigación trabaja ahora con la hipótesis de que la carta de extorsión (el resto de las que se tiene constancia son peticiones de colaboración voluntaria) sea una misiva extraviada o antigua. Fuentes de la investigación aseguran que todavía no se han recibido dichas cartas.

La policía contactó anoche con el presidente de los empresarios navarros que denunció el asunto. José Manuel Ayesa aseguró que "no tenía la carta, pero que sí la había visto" y que recordaba un sello del viernes 5, una fecha que no aparece en el calendario de este año. Hoy, fuentes próximas al empresario navarro han asegurado que la carta tiene un matasellos del 7 de abril.

El proceso de distribución es muy lento

Según fuentes de la investigación, el proceso de distribución de ETA es muy lento y explican que la carta que denunció Ayesa haya podido llegar en los últimos días a su destino. Normalmente, esas cartas tienen su origen en los grupos de Francia y son introducidas después en España a través de distintas estafetas de Correos.

De hecho, hasta finales de marzo se han recibido cartas que habían sido escritas a finales de enero o primeros de febrero. Además, esas cartas responden, literalmente, a un modelo de los usados "meses antes" de la declaración del alto el fuego.