De la Vega acusa al PP de ser el único que no trabaja por la paz aunque le ofrece "mano tendida"

La vicepresidenta primera y portavoz del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó hoy que todos los ciudadanos, organizaciones y partidos políticos "hasta ahora" están trabajando por la paz, con la excepción del PP, que "parece que camina en otra dirección" y al que el Gobierno ofrece "mano tendida" y "puertas abiertas" para el diálogo. Hoy además Joseba Álvarez, dirigente de Batasuna, ha dicho que no tienen "ninguna vocación de ser ilegales"

Preguntada en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre si el Gobierno llamará al líder de la oposición para intentar reconducir las relaciones o esperará hasta que pase la manifestación de la AVT, De la Vega indicó que el Gobierno ha tenido y tendrá una posición de "mano tendida" al diálogo y recalcó que "ahora es el momento de trabajar por la paz, de sumar, no de restar".

"Todos tenemos que caminar juntos en dirección a la paz porque es la única forma de que seamos más fuertes y podamos hacerlo mejor. Creo que todos los ciudadanos, todas las organizaciones, los partidos políticos, las instituciones... Todos trabajan por la paz y vamos a seguir trabajando por la paz. Todos hasta ahora, menos el Partido Popular, que parece que camina en otra dirección", indicó la vicepresidenta.

La vicepresidenta afirmó que el PP "va en otra dirección" y recordó al presidente de este partido, Mariano Rajoy, que "no está rompiendo con el Gobierno" sino con la "confianza de millones de ciudadanos que anhelan y quieren que todos busquemos la paz, pero que la busquemos entre todos".

Batasuna

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El dirigente de la ilegalizada Batasuna Joseba Alvarez afirmó hoy que la participación electoral de la izquierda abertzale no depende de la propia Batasuna, sino de quienes "pusieron en marcha la receta" de la Ley de Partidos que conllevó su ilegalización.

Según dijo, "nosotros no tenemos ninguna vocación de seguir siendo ilegales y nuestra intención es que no sólo Batasuna, sino todo el espectro social que hoy en día no dispone de derechos civiles y políticos los puedan llevar a la práctica las próximas elecciones".

Sin embargo, "no depende de nosotros" ya que, añadió, "es un problema que hay que resolver sobre el marco del proceso y de democracia".