Sociedad

Rubalcaba anuncia patrullas conjuntas con Senegal en los próximos días

La vicepresidenta De la Vega viaja a Finlandia para lograr la implicación de la UE ante la avalancha de inmigrantes irregulares a Canarias

El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha anunciado que en los próximos días llegarán a Senegal un helicóptero y dos patrulleras de la Guardia Civil para vigilar las costas de el país africano y controlar a los cayucos con cientos de inmigrantes que salen cada día a Canarias.

En una comparecencia ante los periodistas después de reunirse con su homólogo senegalés, Ousmane NGom, el titular de Interior explicó que la Guardia Civil colaborará con las Fuerzas de Seguridad senegalesas para interceptar las embarcaciones antes de que zarpen.

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El ministro senegalés agradeció la ayuda española, pero recordó que la inmigración ilegal es un "drama humano" y que tiene que ser abordado como tal. NGom añadió que, además de establecer medidas de vigilancia, es preciso ofrecer a los jóvenes que quieren emigrar alternativas de futuro en su país, y reclamó la colaboración europea para financiar el llamado Programa Reva, destinado al desarrollo agrícola y ganadero.

Rubalcaba, que además se entrevistó con el primer ministro de Senegal, Macky Sall, visitará también hoy Mauritania -donde las patrullas conjuntas funcionan desde el pasado mes de marzo-, para reunirse con el ministro del Interior de ese país, Mohamed Ahmed Ould Lemine. En la delegación española viajan también el secretario de Estado para la Seguridad, Antonio Camacho, y el secretario de Estado de Exteriores, Bernardino León.

La vicepresidenta, a Finlandia

La ofensiva diplomática del Gobierno español tiene otro frente: el miércoles, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, volverá a pedir mayor colaboración de las autoridades europeas a la presidencia de turno finlandesa.

Mauritania y Senegal son los dos países africanos origen de la mayoría de los cayucos que llegan a Canarias. El archipiélago se encuentra desbordado ante la mayor oleada migratoria de su historia reciente: el fin de semana llegaron más de 1.200 subsaharianos.