El Athletic consigue una importante victoria en Riazor (0-2)

El Athletic de Bilbao sacó petróleo en el estadio de Riazor de un tempranero tanto de Javi Martínez, que sentenció el duelo en el descuento, y consiguió una victoria revitalizadora que condena al Deportivo, caótico, a convivir con los vascos en la zona peligrosa de la clasificación.

En un duelo de urgencias Joaquín Caparrós revolucionó la alineación deportivista para cambiar una racha de siete partidos sin ganar, pero el Athletic respondió a los gallegos con el equipo que despertó del letargo un par de jornadas atrás y que se encontró con el premio del gol a los ocho minutos de juego.

Sin tiempo para acoplar a las cuatro caras nuevas de la alineación del conjunto coruñés y los cuatro cambios de posición dispuestos por Caparrós, el Athletic aprovechó un saque de esquina para adelantarse en el marcador con un excepcional remate de Javi Martínez.

Los bilbaínos salieron dispuestos a una batalla física y se esforzaron en contener con una intensa presión al Deportivo, que inició el partido con calma y después del golpe del Athletic intentó reponerse de inmediato, aunque no lo consiguió.

En una noche lluviosa, los banquiazules, sin jugadores habituales en el once como Sergio González o Fabricio Coloccini, tuvieron opciones de restablecer la igualada, pero perdonaron ante la meta defendida por Aranzubia.

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El cancerbero del conjunto vasco salvó con reflejos un remate de Riki a la media vuelta y otro de Arizmendi, que falló una ocasión de oro tras una asistencia de Juan Rodríguez que no fue capaz de transformar a un metro escaso de la línea de gol.

Al contragolpe

El Athletic cedió la posesión a los deportivistas, aunque buscó aumentar su renta al contragolpe y en jugadas a balón parado frente a un rival inoperante en ataque, donde echa en falta un "nueve" que resuelva las ocasiones.

Una carencia que Caparrós intentó compensar con Arizmendi como ariete, Riki en la banda izquierda, Cristian en la derecha y Verdú en la media punta, posición que al inicio de la segunda parte dejó en manos de Juan Rodríguez para pasar a actuar en el doble pivote.

Pero en nueve minutos, el técnico blanquiazul volvió a retocar el equipo y arriesgó con la entrada de Adrián en ataque en detrimento de De Guzmán, retrasó de nuevo a Juan Rodríguez al centro del campo y adelantó a Verdú.

A la locura de remiendos, le correspondió un ataque con poca cabeza al área del Athletic, que aguantó las acometidas de los coruñeses (con diez en los últimos minutos por expulsión de Juanma) y salvó una victoria que consolidó con otro tanto de Javi Martínez sobre la bocina.