Airbus y Boeing se acusan de recibir ayudas públicas ilegales
Bruselas acusa a Boeing de haber recibido ayudas ilegales desde 1992 por parte de Estados Unidos
La Unión Europea ha acusado a los Estados Unidos ante la Organización Mundial del Comercio por haberle pagado desde el 1990 más de 23.000 millones de dólares de subvenciones no reembolsables al constructor aeronáutico Boeing. Por su parte, Washington acusa a la UE por las ayudas públicas concedidas a Airbus, fabricante del A380, el avión comercial más grande del mundo. Cada parte intenta demostrar que las ayudas concedidas por la otra a su respectiva aeronáutica son ilegales.
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La Unión Europea ha acusado a los Estados Unidos ante la OMC por haberle pagado desde el 1990 unos 23,7 mil millones de dólares de subvenciones no reembolsables al constructor aeronáutico Boeing. La UE ha presentado por escrito sus argumentos a los jueces de la Organización mundial del comercio (OMC).
La UE considera que la administración federal americana le había pagado a Boeing entre 1990 y 2004 18,9 mil millones de dólares bajo la forma de ayudas a la búsqueda y al desarrollo y de desgravaciones fiscales. El resto, es decir 4,8 millones de dólares, ha sido pagado por varios Estados como los de Washington o de Illinois o por ciudades americanas, según un resumen de las acusaciones de Bruselas transmitido por la Comisión Europea.
Washington, por su parte, acusa a la UE de haber destinado 15.000 millones de dólares en ayudas indirectas a la exportación de Airbus, lo que prohíben las normas de comercio internacional. Estas subvenciones causaron "un grave perjuicio" a Boeing, según el portavoz estadounidense, ya que permitieron a la firma europea lanzar modelos a un ritmo inimaginable sin esas ayudas.
China entra en el juego
Las audiencias ante la OMC se celebran la misma semana en la que China ha anunciado su intención de competir con ambas potencias occidentales, mediante un nuevo programa aeronáutico que le permitiría sacar al mercado sus propios aviones comerciales grandes a partir de 2020. A raíz de este anuncio, UE y Estados Unidos estarían interesados en que del proceso ante la OMC resulten las reglas internacionales sobre las ayudas al sector. Ambos gozan de una situación de duopolio que podría peligrar por la llegada de China o por el interés de otros países en vender sus propios superaviones.
Una disputa de tres años
Durante los dos últimos días, representantes de la UE y de Estados Unidos se han visto las caras por primera vez en la sede de la OMC, desde que se denunciaron mutuamente en octubre de 2004. Desde entonces, ambas partes sólo han podido ejercer la disputa mediante un mero intercambio de información. Los argumentos pasan ahora a un escenario legal, el que ofrece la OMC en su sede de Ginebra.