La Eurocámara mantiene abierto el expediente con las quejas de los trabajadores de Telemadrid
Tras escuchar la exposición de los representantes del Comité de Empresa de Radiotelevisión Madrid
Madrid
La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo mantendrá abierto su expediente sobre la queja de los trabajadores de Telemadrid respecto a la posible vulneración del derecho a la libertad de expresión en el ente autonómico.
Así lo decidió hoy el presidente del órgano parlamentario, el conservador polaco Marcin Libicki, tras escuchar la exposición de los representantes del Comité de Empresa de Radiotelevisión Madrid (RTVM).
La Comisión Europea confirmó por su parte que carece de "base legal" para poder certificar los hechos denunciados.
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Pero ningún grupo político se opuso a mantener abierto el expediente incoado en el Parlamento Europeo, tampoco el Partido Popular Europeo, cuyo portavoz en el debate, Luis Herrero, calificó de "legítima" la petición, aunque criticó al grupo socialista por no haber admitido en 2006 otra relativa a la COPE.
Previamente, el presidente del Comité de Empresa de Telemadrid, José Ángel Jiménez, aseguró a los diputados que la actual dirección del ente ha llevado a la cadena a "grados tan groseros, zafios e intolerables de manipulación y sectarismo en sus informaciones, que resultan difíciles de creer si no se es testigo diario".
Achacó esta situación al nombramiento en 2003 como director general de Manuel Soriano, quien, según dijo, "no es un periodista independiente" pues había trabajado antes como "responsable de comunicación" de la presidenta del Gobierno autonómico, Esperanza Aguirre.
Jiménez, acompañado por veinte trabajadores del ente público, entregó a la comisión parlamentaria un dossier que documenta casos de "manipulación", "tergiversación" o "censura", en asuntos como los atentados del 11-M, el alto el fuego de ETA o una entrevista al senador del Partido Popular Manuel Fraga.
Afirmó que la dirección de Telemadrid vulnera con estas prácticas el artículo 11 de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, relativo a la libertad de expresión, y pidió por ello a la Eurocámara "una reprobación política frente a una actuación inmoral".
Acto seguido, un representante de la Comisión Europea explicó que está institución es "muy sensible a que todas las televisiones públicas se comporten conforme a los principios de pluralismo, transparencia e independencia" y que "ha tomado nota" de las denuncias del Comité de Empresa de Telemadrid.
Pero añadió que el Ejecutivo comunitario no dispone de "instrumentos de investigación", ni de "base legal" -la Carta de Derechos Fundamentales aún no es jurídicamente vinculante- para investigar los hechos y apuntó que el posible conflicto legal debería dirimirse en los tribunales "en el nivel nacional".
