Sarkozy nombra primer ministro francés a su estrecho colaborador François Fillon
El nuevo jefe de Gobierno fue consejero político del recién nombrado presidente en las pasadas elecciones
Alfombra roja, guardia republicana el protocolo ha vuelto a desplegarse esta mañana en París. En este caso, en el Palacio de Matignon -sede del primer ministro- donde Dominique de Villepin, tras algo más de dos años, ha dado el relevo a François Fillon, nombrado esta mañana al frente del gobierno por Nicolás Sarkozy.
No ha sido una sorpresa. Este político de 53 años ha sido el consejero político del flamante presidente durante los dos últimos años y ha dirigido el programa electoral que ha llevado a Sarkozy al Elíseo. Cuatro veces ministro, Fillon conoce bien los asuntos económicos, sociales y educativos.
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Tres ámbitos en los que deberá poner en marcha las reformas prometidas durante la campaña. En su discurso tras recibir el testigo de Villepin, Fillón ha confirmado que su "deber y mandato es cumplir con todos los compromisos adquiridos porque ese es el precio de la renovación política" votada por los franceses el pasado día 6 de mayo.
Fillon, el contrapunto de Sarkozy
François Fillon es hijode madre vasca, aficionado a los toros y piloto ocasional en carreras de coches. Casado y padre de cinco hijos, fue el diputado más joven de la Asamblea con 27 años en 1981 y en la actualidad es senador por el departamento de la Sharte. Licenciado en derecho y ciencias políticas su carácter, reservado, es el contrapunto perfecto al extrovertido e hiperactivo presidente Sarkozy.
Tiene fama de eficaz y discreto, de hecho las dos únicas reformas de importancia llevadas a cabo en el último mandato de Jacques Chirac -como la del sistema de pensiones- son obra suya como ministro de Trabajo, primero, y de Educación, después. No obstante, Villepin no le quiso entre sus ministros y fue expulsado del gobierno tras la victoria del no en el referéndum sobre la Constitución Europea. Enfadado, se giró entonces hacia Sarkozy y pronunció una frase lapidaria: "De Chirac no se recordará nada, sólo mis reformas".
Villepin, de vuelta a Napoleón
Ovación cerrada y bravos del personal de Palacio para Dominique y su esposa Marie Laure: la elegante pareja que ha ocupado la sede del primer ministro durante los dos últimos años ha marcado estilo, como ha reconocido el propio François Fillón. Villepin, muy sonriente y relajado, ha dicho de su sucesor que "tiene todas las bazas para hacer triunfar a Francia".
El famoso ministro de Asuntos Exteriores que dijo "no" a la guerra de Irak con un discurso épico ante Naciones Unidas, espera dedicarse a su pasión: la literatura, con un nuevo volumen sobre Napoleón y, quizá, otro de poesía.