La Ley de Memoria Histórica declarará ilegítimos los juicios franquistas

Más de un año ha costado que el Gobierno lograra apoyos para sacar adelante la Ley de Memoria Histórica, que comenzará mañana miércoles su tramitación en el Congreso. Se trata de un texto complicado por la posibilidad de herir diversas sensibilidades, pero aún así no contará ni con el respaldo del PP -que siempre ha rechazado las negociaciones- ni con ERC, que la considera demasiado benevolente.

Pero los socialistas también han tenido que ceder, y por ejemplo, han incluído algunos puntos exigidos por Izquierda Unida, como el que declara la "ilegitimidad de los tribunales y cualesquiera otros órganos penales o administrativos que, durante la Guerra Civil, se hubieran constituido para imponer, por motivos políticos, ideológicos o de creencia religiosa, condenas o sanciones de carácter personal, así como la de sus resoluciones". Además, el texto deroga toda la legislación represora del franquismo.

Lo que no está tan claro es qué pasará con los símblos franquistas (como las estatuas de Franco que hasta hace pocos años presidían plazas en numerosas ciudades españolas). Los diversos partidos están trabajando para que haya excepciones como en casos de cualidad "artística" y planean eliminar una disposición que afectaba a cualquier obra que ensalzara "sólo una parte" de los bandos enfrentados, y que hubiera obligado a eliminar símbolos dedicados, por ejemplo, a Dolores Ibárruri (La Pasionaria).

Si hay consenso, después se reunirá la Comisión Constitucional del Congreso -con toda probabilidad la próxima semana-, que emitirá un dictamen que debe ser aprobado definitivamente en el pleno de la Cámara Baja, previsiblemente en la última sesión plenaria de octubre.

ERC Y PP, en desacuerdo

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Quedan fuera del acuerdo ERC y PP. Desde el partido nacionalista catalán se asegura que la ley va a condenar a las víctimas del franquismo a un "vía crucis judicial individual" y que, como consecuencia de uno de los cambios introducidos en el texto a propuesta de CiU, la norma acabará "equiparando" a los bandos nacional y republicano.