Los planes para impulsar la reproducción del oso cantábrico no resultaron como los expertos esperaban. Tras juntar a dos hembras y un macho, el estrés ha inhibido el celo de las osas «Paca» y «Tola», que huyeron de «Furaco». La Fundación Oso ha juntado en el mismo cercado en Santo Adriano en Asturias a «Paca», «Tola» y «Furaco», el macho procedente del Parque Natural de Cabárceno de Cantabria. Su objetivo era que se iniciara el cortejo para garantizar la reproducción del oso cantábrico. Desde un principio «Furaco» mostró interés por la más pequeña de las osas, «Tola». No obstante, la hembra terminó huyendo del macho. Por su parte, «Paca» se mostró mucho más nerviosa y realizó continuas carreras, siempre alejada del macho. Los osos compartirán espacio hasta octubre con la supervisión de un equipo de expertos integrado por personal de la guardería del Principado, técnicos de la FOA, y veterinarios de la Universidad de León.