EEUU compara la crisis con el crack del 29 y el rescate con el 'New Deal'
Las líneas anunciadas del plan pasan por crear 2,5 millones de empleos, aumentar los recortes tributarios y ampliar el gasto público
El debate nacional sobre cómo salvar a EE.UU. del abismo económico encuentra paralelos con el 'New Deal' que lanzó el presidente Franklin D. Roosevelt durante la Gran Depresión de la década de 1930, y ahora los demócratas se empeñan en aprobar un plan de estímulo de proporciones mayúsculas.
El presidente electo, Barack Obama, que ganó los comicios en parte porque la crisis colmó la paciencia del electorado, dijo que "solo hay un presidente a la vez" pero, le guste o no, esa crisis lo lanza al protagonismo, coincidieron expertos.
Más información
- El Gobierno británico baraja reducir el IVA para reactivar la economía
- El Gobierno perfila plan para rescatar a Citigroup
- El gobierno británico anuncia un plan de 23.500 millones de euros para reanimar la economía
- Obama dice buscar un Gobierno con "sentido común" para afrontar la crisis
- Obama anuncia un organismo asesor para la recuperación económica
- Obama anuncia la creación de dos millones y medio de empleos en dos años
- Obama confirma a Geithner como Secretario del Tesoro y elige a Summers como director del Consejo Económico Nacional
- Bancos y cajas podrán solicitar los avales del Estado
El sábado, Obama delineó un plan económico aún en ciernes que busca devolver la calma a los mercados y a la opinión pública ante una economía que, según los pronósticos, se va a pique.
Ese plan de dos años prevé crear o preservar 2,5 millones de empleos, principalmente para obras de infraestructura, e incluiría recortes tributarios y más gastos públicos.
Durante la contienda, Obama prometió un programa de 175.000 millones de dólares, pero el plan definitivo será mucho mayor, según sus asesores.
Según observadores, los paralelos entre la Gran Depresión que estalló en 1929 y la crisis actual, son inevitables: la salida de una desprestigiada Administración republicana, una crisis financiera global, y un Congreso incapaz de aprobar medidas en las postrimerías de una sesión legislativa.
Al igual que en 1932, cuando EE.UU. cerraba un capítulo de hegemonía republicana, en 2008, la agenda progresista suma adeptos y obliga a Obama a llenar el vacío de poder entre el saliente Gobierno de George W. Bush y la Administración que asumirá las riendas el próximo 20 de enero.
La crisis, según advirtió Obama en su discurso sabatino, va de mal y en peor, y su equipo no tiene tiempo que perder.
Las crisis financiera, de vivienda y de crédito continúan sin frenos y el plan de rescate financiero de 700.000 millones de dólares no ha logrado calmar a los mercados, se quejó hoy la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, en una entrevista con la cadena CBS.
- <a name="despiece1"></a>"Tendrá muchos ceros"