El Banco de España señala "que no es prudente" cerrar la puerta a recapitalizaciones de entidades financieras
Fernández Ordóñez cree que la "profundidad" de la crisis económica puede implicar un proceso de reestructuración del sistema bancario español y además prevé una recesión "de cierta magnitud"
Madrid
El gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, ha considerado hoy que dada la "enorme incertidumbre" económica y financiera que sigue existiendo, "cerrar la puerta" a medidas como las recapitalizaciones bancarias con fondos públicos "no parecería una actitud prudente".
En su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso, ha estimado que la "profundidad" de la crisis económica puede implicar un proceso de reestructuración del sistema bancario español.
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De producirse dicha reestructuración, ha asegurado que el organismo supervisor actuará "como lo ha hecho siempre", cuidando que ni los depositantes ni los acreedores se vean en absoluto afectados", y "con discreción y profesionalidad".
El gobernador ha recordado que dentro de un mes el organismo supervisor hará públicas sus previsiones de crecimiento español para este año y el que viene y, aunque no quiso adelantar ninguna cifra, advirtió de que los cálculos hablarán de una recesión "de cierta magnitud" en línea con las que han previsto organismos como el FMI, la Comisión Europea o la OCDE.
Dicha recesión, ha advertido, va a llevar, "por sí sola", a que el crédito en España se estanque o incluso baje.
Ha subrayado, además, que "en cualquiera de los escenarios posibles" de superación de esta crisis, las condiciones crediticias serán mas restrictivas y más limitadas que antes de la misma.
Aunque ha destacado que los bancos y cajas afrontaron con "relativa fortaleza" la primera fase de la crisis financiera internacional, lo tendrán ahora "más complicado" para eludir la "segunda ronda de efectos" de esta situación.
Entre estos efectos, Fernández Ordóñez ha subrayado la persistencia de la falta de liquidez, las dificultades de financiación y las "sobrerreacciones" o reacciones exageradas de los bancos y cajas a la recesión.
Así, ha explicado que la contracción del crédito se ha producido no sólo porque las familias retraigan su gasto, sino también por las menores expectativas de empresarios y trabajadores sobre sus rentas futuras y de bancos y cajas sobre el futuro de mercados concretos de gran relevancia en el crédito, como el de la vivienda.
Por tanto, ha añadido, el retroceso de la demanda, que en su opinión se produjo ya antes del recrudecimiento de la crisis financiera, "resulta insuficiente" para explicar, por sí solo, la desaceleración del crédito.
El gobernador ha considerado en cualquier caso que "nada sería más contraproducente" que caer en "la simplificación errónea" de que la salida de la crisis depende exclusivamente de la disponibilidad abundante de crédito.
"La lógica ansiedad" por ayudar a que las familias y empresas accedan al crédito, ha observado, puede derivar en diagnósticos "equivocados", con medidas que pueden resultar "contraproducentes".
Por eso ha alertado de que las propuestas de nacionalismo económico y de proteccionismo que están surgiendo en algunos países pueden amplificar la recesión global y ha insistido en que las acciones que se lleven a cabo sean concertadas y coordinadas entre el mayor número posible de países.
Fernández Ordóñez ha advertido además de que la mayor parte de estas acciones requieren de un gran esfuerzo presupuestario, por lo que ha considerado "imprescindible" que se lleven a cabo sin poner en peligro la solidez de las finanzas públicas.