Detenido un etarra en Francia después de robar un coche a punta de pistola
La gendarmería gala arresta a Alex Acarregui Casas en el departamento 12.- La policía lo sitúa en la logística de la banda terrorista
Madrid
La Gendarmería francesa ha detenido a Alex Acarregui Casas en el departamento número 12 del país galo. El etarra, que la Policía sitúa en la logística de la banda, ha sido arrestado después de robar un coche a punta pistola. Acaba de salir de prisión y cruzado la frontera. Fue detendio en 2002 cuando dos jóvenes de ETA fallecieron mientras manipulaban un artefacto explosivo.
Akarregi ha sido sorprendido por la Policía local de la citada localidad cuando trataba de robar un coche, que ha abandonado para emprender la huida en otro vehículo, con el que ha sufrido un accidente.
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Las fuentes consultadas han añadido que, en ese momento, el etarra ha robado, esta vez a punta de pistola, otro automóvil, con el que ha tenido un nuevo accidente antes de ser detenido por la Gendarmería.
Akarregi huyó de España en 2002, tras la explosión en Bilbao de un vehículo en el que los miembros de la banda terrorista Hodei Galarraga y Egoitz Gurrutxaga -que resultaron muertos- transportaban explosivos.
Detenido en julio de 2003 cuando pretendía coger un avión en Amsterdam con destino a Venezuela y portaba el pasaporte de su hermano, las autoridades holandesas le extraditaron a España el 7 de enero de 2004.
En diciembre de ese año, la Audiencia Nacional le condenó a cinco años de cárcel por alquilar el vehículo utilizado por Galarraga y Gurrutxaga, gestión que -según la sentencia- había realizado "identificándose con el permiso de conducir y proporcionando su domicilio".Akarregi salió en libertad en julio del año pasado y se reincorporó a ETA.
Comenzó en la kale borroka
Su historial delictivo, según el Ministerio del Interior, se remonta a 1993, cuando todavía menor de edad participó en la brutal paliza propinada al ertzaina Ander Susaeta durante la Semana Grande bilbaína por un numeroso grupo de radicales.
En enero de 1995 la Audiencia Provincial de Bilbao le condenó por estos hechos a dos meses de arresto mayor y a treinta días de arresto menor, por un delito de atentado y por una falta de lesiones.
Un año antes de que se dictara la sentencia, en mayo de 1994, Akarregi había sido detenido de nuevo, esta vez en relación con unos incidentes registrados en el juicio al militante de Jarrai Juan Carlos Tapia.
