ETA reaparece en Vizcaya con una bomba contra la sede del PSE de Durango

El consejero de Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares, ha agradecido la colaboración ciudadana que ha permitido desalojar el edificio de Durango antes de que estallara el artefacto colocado por ETA en la sede del PSE. La organización terrorista ha reaparecido en Vizcaya con una bomba con tres kilos de explosivo. Las alarmas saltaban poco después de las once de la noche cuando un vecino avisaba a la policía local de que un encapuchado había depositado un paquete en la puerta posterior de la casa del pueblo. Se activaron así los protocolos de seguridad, se acordonaba la zona y se desalojaba a los vecinos.

Una hora después y sin dar tiempo a que el robot policial hiciera su trabajo, la bomba ha expotado sin causar heridos, aunque sí importantes daños materiales.

El portavoz socialista, José Antonio Pastor, ha señalado que todavía desconocen la cuantía de los daños que ha causado la explosión. "Los cristales del bloque que previamente había desalojado la Ertzaintza están bastante dañados", ha indicado.

La explosión también ha dañado una tubería de gas que ha causado un escape. Los Bomberos han tenido que repararlo, algo que ha impedido volver a sus casas durante unas horas a las cerca de 40 familias desalojadas.