Seis miembros de la ONU mueren en un ataque en Kabul
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Madrid
Al menos trece personas murieron este miércoles, seis de ellos trabajadores de la ONU, en el enfrentamiento mantenido entre las fuerzas afganas y milicianos talibán que tomaron un centro de la organización internacional en el corazón de Kabul. Las fuerzas de seguridad se hicieron con el control de la situación sobre las 08:30 hora local, dos horas después del comienzo del asalto. Asimismo, un cohete impacto un hotel de lujo que forzó la evacuación de 100 personas en otro asalto aparentemente coordinado.
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Los fallecidos, cuyas nacionalidades se desconocían, residían en una casa de huéspedes, de acuerdo con Adrian Edwards, portavoz de Naciones Unidas, que no confirmó si los trabajadores eran el objetivo del ataque o simplemente fueron víctimas del intercambio de disparos.
"Hay cinco o seis terroristas en su interior", declaró Waheed Sadiqi, un agente de Policía presente en el edificio, en donde suelen hospedarse miembros de la ONU y de otras organizaciones internacionales.
Posteriormente, un portavoz talibán indicó que tres terroristas suicidas entraron en el edificio armados con granadas y metralletas además de cinturones suicidas. Los tres milicianos fueron abatidos por las fuerzas de seguridad afganas que se hicieron con el control de la situación sobre las 08:30 hora local, dos horas después del comienzo del asalto.
El portavoz del Ministerio del Interior afgano, Zemarai Bashary, confirmó el asalto al edificio en el corazón de la ciudad, mientras que el movimiento islámico se atribuyó la responsabilidad del ataque en un mensaje en inglés remitido a Reuters.
Poco después del primer atentado, se registraron explosiones en el hotel de lujo Serena donde al menos un cohete impactó contra el edificio cerca del Palacio Presidencial, según informaron testigos y fuerzas de seguridad. El personal del hotel no estaba disponible para verificar la información aunque según un huésped, unas 100 personas fueron trasladadas a un bunker subterráneo para evitar víctimas.
El enfrentamiento en el centro de la ONU, que se prolongó durante una hora, incluyó intensos disparos de armas automáticas y granadas de propulsión por cohete, y fue seguido de una densa cortina de humo que salía de los edificios de la ciudad. Según informa la CNN en su edición digital, el ataque se produjo en un área bastante segura de la ciudad que no suele ser el blanco de los ataques de milicianos talibán.
