Matanza en una base militar de Texas

La cifra de muertos en el asalto a la base militar de Fort Hood, en Texas, la más grande de Estados Unidos con 50.000 soldados, ha ascendido a 13, mientras que el número de heridos es de al menos 31. El tiroteo ha conmocionado a la opinión pública estadounidense hasta el punto de que el presidente de EEUU, Barack Obama, ha interrumpido una comparecencia pública para solidarizarse con las familias y lamentar "el terrible brote de violencia".

El número de fallecidos tras el tiroteo en la mayor base militar de Estados Unidos, la de Fort Hood, en Texas, se ha elevado a 13, entre ellos el propio autor, después de que uno de los 31 heridos falleciese en el hospital, según informaron fuentes oficiales.

Las autoridades identificaron al supuesto autor de la masacre como Malin Nadal Hasan, un psiquiatra que trabajaba para el Ejército y que fue ascendido recientemente a mayor. El sospechoso, que fue herido de gravedad durante el tiroteo, tenía unos 40 años e iba a partir el próximo 28 de noviembre hacia Irak, según la cadena MSNBC.

En cuanto a las víctimas mortales, al menos uno de los fallecidos era civil, en concreto un policía, indicó por su parte la CNN. De los fallecidos restantes diez serían soldados.

El general de Brigada Robert W. Cone explicó que Hasan usó dos pistolas para perpetrar el asalto y adelantó que durante los primeras horas se detuvo a dos soldados, aunque no aclaró los motivos de los arrestos. Estos militares finalmente fueron puestos en libertad (ya de madrugada en España).

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El suceso comenzó en torno a las 13:30 (hora local) cuando el presunto autor abrió fuego en las instalaciones donde se encuentran los soldados que van a ser enviados al extranjero, explicó el sargento Jamie Posten. El Ejército indicó desde un primer momento que el tiroteo parece un acto criminal independiente y se descartó cualquier implicación de índole terrorista.