Obama: "Ninguna fe justifica estos actos asesinos"
El presidente de Estados Unidos asiste al funeral por las 13 víctimas mortales del tiroteo en la base militar de Fort Hood, en Texas
El presidente de EEUU, Barack Obama, ha asegurado que "ninguna fe justifica estos actos asesinos", durante su intervención en el funeral por las 13 víctimas mortales del tiroteo ocurrido en la base militar texana de Fort Hood. El mandatario, acompañado por su mujer, Michelle Obama, ha señalado que el culpable de la matanza "tendrá que encarar la justicia en esta vida y en la de más allá". La sombría ceremonia se produce en medio de un intenso debate sobre el papel de las autoridades, que mostraron indiferencia ante las señales de alerta en torno al sospechoso. El psiquiatra Nidal Malik Hasan trabajó durante años con soldados gravemente heridos.
Más información
- Ascienden a 12 los muertos en un tiroteo en una base militar de Texas
- Matanza en una base militar de Texas
- Obama supera el primer escollo para implantar un nuevo sistema sanitario en EEUU
- Obama llega a Tokio en la primera parada de su gira asiática
- Los padres de un menor impiden que provoque una matanza en su colegio
Obama ha recordado los "tiempos difíciles" que corren para EEUU, con tropas en Irak y Afganistán. Sin embargo, ha rechazado que sirva para justificar una tragedia "incomprensible". "Ninguna fe justifica estos actos asesinos y cobardes. Ningún Dios amante y justo los mira favorablemente", ha dicho Obama ante una multitud de 15.000 personas, la mayoría soldados con uniforme de camuflaje, reunidos en Fort Hood. "Y por lo que ha hecho, sabemos que el asesino se encontrará con la justicia (...) en este mundo, y en el próximo", ha aseverado.
El tiroteo marcó el último golpe a las Fuerzas Armadas estadounidenses, bajo presión por su responsabilidades en las guerras abiertas. En medio del debate, Obama evalúa enviar miles de tropas adicionales a la impopular guerra en Afganistán, aún si se produce la retirada de las tropas estadounidenses en Irak.
El autor de la matanza
Familiares han dicho que Hasan, descendiente de palestinos, quería retirarse del Ejército para evitar ser enviado a Afganistán, y fue hostigado por sus compañeros militares debido a su religión. Las guerras de Irak y Afganistán avivaron los sentimientos anti estadounidenses de muchos musulmanes a lo largo del mundo.
Agencias de inteligencia descubrieron que Hasan tenía contactos con islamistas simpatizantes con Al Qaeda y enviaron la información a las autoridades antes de que supuestamente iniciara el tiroteo, según informaron los funcionarios.
Las autoridades federales no emprendieron ninguna acción contra Hasan y se determinó que la información no dio pistas de que estuviera planeando un ataque o recibiendo órdenes de Anwar al-Awlaki, un clérigo anti estadounidense de Yemen.