España afronta su primera 'final'

La selección española se enfrenta este viernes a Chile en busca de un triunfo que asegure su presencia en los octavos de final del Mundial de Sudáfrica, que devuelva el crédito perdido en los dos primeros encuentros y que sitúe de nuevo al equipo en la senda del título.

Todas esas tareas tiene la campeona de Europa por delante en su decisiva cita de mañana. Y es que la derrota (0-1) ante Suiza y la agridulce victoria (2-0) frente a Honduras hace que la trascendencia de este último choque de la fase de grupos vaya más allá de lo puramente clasificatorio. España no sólo busca el pase, sino despejar dudas, restituir su moral y, en definitiva, regresar al escenario previo al comienzo del campeonato.

Para que el Mundial que se presentaba como la oportunidad histórica de la 'Roja' no acabe en un nuevo fracaso, la selección no puede fallar ante Chile. Un triunfo aseguraría billete hacia octavos, con independencia de lo que ocurra en el otro encuentro del grupo. Un empate o incluso una derrota podría también ser suficiente, pero entonces Suiza tendría que tropezar ante Honduras.

La victoria dejaría además abierta la puerta hacia la primera plaza, ya que, aunque el triunfo fuera por la mínima, bastaría para superar el 'goal-average' chileno. Sólo un triunfo de Suiza por una diferencia de un gol más de lo que lo hiciera España, condenaría al combinado nacional al segundo puesto o llevaría a un sorteo para dilucidar la primera posición.

Cuentas aparte, por la mente de España sólo pasa ganar. El fallido debut en Sudáfrica ha obligado a los de Vicente Del Bosque a tomarse los dos encuentros restantes del grupo como si de una eliminatoria más se tratase. Por eso, superados los treintaidosavos contra Honduras, la cita de Pretoria bien sería un encuentro de dieciseisavos en esta redefinición del campeonato.

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