Madrid se merece candidatos que digan la verdad
Los socialistas madrileños vuelven a estar contra las cuerdas a menos de un año de las elecciones autonómicas y municipales.
Lo mismo que les pasó hace cuatro años y más o menos lo que les viene sucediendo desde los tiempos de Tierno Galván. Una maldición que pudo romperse en 2003 con Simancas pero que truncaron Tamayo, Sáez y el PP de Esperanza Aguirre que gracias a aquel escándalo político sin precedentes recuperó el poder que había perdido en las urnas.
En 2007, tras el último fracaso de Simancas y la desafortunada aventura municipal de Miguel Sebastián; llamó la atención en medio del desierto el éxito electoral del alcalde de Parla, el más votado de España. Tomás Gómez, que ahora se lleva las manos a la cabeza por las injerencias de Ferraz, fue aupado con el apoyo de Zapatero y de la dirección del partido a la secretaría general del PSM.
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Han pasado tres años y de lo que más presume Gómez es del apoyo del partido; del viejo aparato del partido habría que decir y añadir que ese aparato es el mismo que ha llevado al PSM de derrota en derrota. Las encuestas hechas por el partido son demoledoras en su contra y está claro que candidatos como Trinidad Jiménez o Lissavetzky tienen mucho más tirón electoral.
Pese a todo ello, Gómez tiene todo el derecho del mundo a presentarse, a creer que es el mejor candidato y a soñar con ser presidente de la Comunidad; a lo que ya no tiene derecho es a mentir. No decir la verdad es un mal comienzo para un candidato que va a pedir la confianza de los ciudadanos.
El presidente del PSOE, Manuel Chaves le llamó hace unos días y le dijo que, vistas las encuestas, la Ejecutiva Federal consideraba que no era el candidato idóneo para intentar ganar a Esperanza Aguirre. No le pidió que no se presentara pero el mensaje era claro y diáfano y venía desde la cúspide del partido.
La Cadena SER adelantó el viernes esta noticia y Tomas Gómez, atrincherado y en una actitud pueril e incomprensible, primero negó hasta que hubiera hablado con Chaves; después aceptó una entrevista en la SER para intentar negarnos 6, 8 o 10 veces, sin conseguirlo, claro y hasta consiguió que Leire Pajín impulsara una insólita nota de prensa del PSOE desmintiendo lo que todo el mundo sabe que hizo el presidente del partido. Por cierto, que alguien en el partido debería pedir explicaciones por ese comunicado.
Tomás Gómez quiere ser candidato y si las bases y el partido le apoyan, lo será; ahora bien, si no ha dicho la verdad en esta ocasión, tenemos derecho a preguntarnos que hará cuando tenga que tomar decisiones mucho más importantes y con mayores responsabilidades.