El presidente de Costa de Marfil se rinde tras cien días de atrincheramiento en el poder
El mandatario saliente, Laurent Gbagbo, pide protección a Naciones Unidas
Después de más de tres meses de atrincheramiento en el poder, Laurent Gbagbo, presidente saliente de Costa de Marfil, se rinde. El mandatario perdió su legitimidad el 28 de diciembre, cuando perdió las elecciones frente a Alassane Ouattara. No obstante, se había negado a dejar las riendas del país en manos de su rival, hasta este martes, cuando, según Naciones Unidas, decidió apartarse y pedir protección a la Misión de la ONU en Costa de Marfil (UNOCI)
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Este martes, Gbagbo ha mostrado su "disposición" a apartarse del poder, según ha aclarado una fuente de la ONU después de que un documento interno de la organización citado por Reuters confirmase la salida del mandatario. El presidente ha pedido "la protección de la UNOCI", según el texto, y ha iniciado unas negociaciones en las que se determinará cuál será su futuro. El dirigente perdió su legitimidad el 28 de diciembre, cuando Ouattara le venció en las urnas. No obstante, se negaba a dejar la dirección de Costa de Marfil en manos de su contrincante, que cuenta con el apoyo acérrimo de Francia.
De hecho, este mismo martes, Nicolas Sarkozy, presidente galo, instaba al marfileño a formar un gobierno de unidad nacional cuanto antes. Así, lo empujaba a tomar la iniciativa "con un llamamiento a la reconciliación, el perdón", explicaba Alain Juppé, titular francés de Asuntos Exteriores. La conversación se estableció vía telefónica. El ministro ha afirmado que cree que Ouattara es un demócrata y que está dispuesto a lograr un acuerdo de reconciliación pacífica en Costa de Marfil. El presidente podría anunciar una amnistía para los miembros de la administración dirigida por Gbagbo, e incluir a algunos de ellos en el nuevo gobierno.
"Hemos solicitado a la UNOCI que garantice su seguridad física y la de su familia", ha agregado Juppé. En la misma comparecencia, Gerard Longuet, su homólogo en Defensa, sugirió que Gbagbo podría exiliarse en algún país de África: "Hay muchos países africanos dispuestos a dar la bienvenida a otros hermanos". Horas antes de que se conociese la noticia, Barack Obama, presidente estadounidense, elogió los "esfuerzos" de Francia, cuyas tropas "están apoyando esa misión" de "las fuerzas de paz de la ONU". De hecho, este mismo lunes, los helicópteros galos bombardearon posiciones de las fuerzas leales a Gbagbo. El dirigente transmitió su preocupación a través de un comunicado y empujó al ''atrincherado'' a evitar "más sufrimiento" a sus ciudadanos y "más derramamiento de sangre".