¿Por qué están indignados?

En la Asamblea celebrada a las 13:00, los ciudadanos concentrados en la Plaza del Sol han vuelto a definirse como "ciudadanos independientes". En Sol, que ya parece una pequeña ciudad, como en botica, hay de todo.

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"Volveré a votar cuando pueda elegir al director del FMI" Felipe, 63 años

Está de acuerdo los con la reivindicaciones principales los manifestantes y es el primer día que viene a la Puerta de Sol desde que comenzara la acampada el pasado domingo. Hasta ahora votaba pero no volverá a hacerlo hasta que haya elecciones al FMI que "son los que mandan". Mis dos hijos, "madrileños como yo" han venido desde el miércoles tienen 33 y 36 años, ambos con trabajo.

"¿Qué hacen los jóvenes que no salen a la calle?" Estrella, 54 años

"Ya me extrañaba que los jóvenes tardaran tanto, pensaba que estaban cómodos en sus casas", comenta. Esta tarde se manifestará a las ocho de la tarde "yo también me manifesté en los setenta, me considero cercana a la izquierda y ahora hemos perdido los derechos del trabajador". "Los jóvenes no tienen ni vivienda, ni trabajo... ¿cómo van a formar una familia? ¿Por qué no salen a la calle?", comenta, en parte, aliviada "ya era hora".

"Todo español tiene derecho a una vivienda digna" Carmen, 65 años

"Hoy es mi primer día y si no fuera por la artritis me quedaba esta noche", reconoce que su hija ha estudiado una carrera y ahora no encuentra trabajo, "a ver si entre todos podemos hacer algo".

"Abre tu corazón a la Puerta del Sol" María, 27 años

"Vengo con este cartel colgado desde casa, he venido en metro a Sol". ¿Por qué? "Yo pido que nos entiendan, que nos dejen expresar nuestras emociones y nuestra frustración". Es técnico de empleo y lleva un mes en paro, "encadenando contratos basura, desde el año pasado".

"Esta tarde estaré con mis hijos" Rosana, 47 años

"Ayer les expliqué lo que estaba lo que está ocurriendo en Sol a mis hijos, tienen 15 y 10 años", dice Rosana, "hoy es mi primer día, pero esta tarde estaré aquí con mis hijos". Rosana es ama de casa ("porque quiero"), espera que "esto sirva para algo"; "hay que venir en los ratos libres" porque, según ella, "hace mucho que no tienen en cuenta a los de a pie".

"Dicen que aquí solo hay pipiolos, ¿cuántos años tienes usted señora? ¡Mira 80!" María, 58 años

María trabaja en la administración del Estado desde hace 30 años, "con tres oposiciones". "Es mi primer día, no he podido asistir por motivos de salud, pero no me he podido resistir", explica. "He venido porque desde hace mucho soy una indignada, todos los gobiernos me han congelado el sueldo", pero también tiene dos hijas de 30 y 25 años: "No puedo consentir que a mi hija, en este caso la mayor, se la incluya en el lote de la generación perdida, sólo porque no tiene trabajo, a pesar de haber estudiado dos carreras, un postgrado y hablar 5 idiomas".

"Vengo por solidaridad con las personas jóvenes y no tan jóvenes, que lo están pasando muy mal" y añade que le gusta que los ciudadanos "despierten". Tiene claro que va a votar "porque 35 años no son nada, y nosotros podemos hacerlo". ¿Y qué piensa de la campaña electoral? "Son tediosas, aburridas, sólo se dedican al insulto por el insulto, es una vergüenza".

"Los que están aquí no son de izquierdas ni de derechas" Rafael, 49 años

Ha estado en Bélgica y Alemania desde el lunes, "al mirar el periódico pensé: "me han cambiado el país". Viste un traje oscuro pasea un pequeña maleta con ruedas, "los que están aquí no son de derechas ni de izquierdas y me parece estupendo que la gente se manifieste". "¿Cómo se entiende que un hospital público lo gestiones una empresa pública y no la Consejería de Sanidad? Así evitan que las cuentan pasen los controles de cuentas en el parlamento autonómico...", se pregunta. ¿Qué propone? "Me gustaría que nuestros políticos no fueran políticos profesionales, que tengan una profesión y luego trabajen para los demás". No vive en Madrid pero, si puede, volverá. "¿Sabes si hay alguna en Asturias?", se despide.

"Es lo que nos faltaba a los jóvenes" Cora, 23 años

"Me llena de esperanza y de ilusión, es lo que nos faltaba a los jóvenes", comenta esta canaria que ha venido este fin de semana a Madrid. "No podía no venir", comenta emocionada, "esto es algo que va para largo, tenemos que trabajar y ser tolerantes".