El Congreso toma en consideración la reforma constitucional de los grupos socialista y popular

El pleno extraordinario del Congreso ha aprobado este martes, con 318 votos a favor, 16 en contra (entre ellos, el del socialista Antonio Gutiérrez) y dos abstenciones, la toma en consideración de la propuesta para reformar la Constitución y establecer una disciplina presupuestaria para todas las administraciones. Además, ha dado el visto bueno a su tramitación con carácter urgente y por la vía de lectura única, con 319 votos a favor y 17 en contra, por lo que podría estar aprobada definitivamente el próximo viernes. Se abre así el plazo de enmiendas y los grupos tendrán hasta las 14:00 del jueves para presentar sus propuestas de modificación.

Los portavoces de los grupos socialista y popular en el Congreso de los Diputados, José Antonio Alonso y Soraya Sáenz de Santamaría, respectivamente, han defendido desde la tribuna de oradores de la cámara baja la reforma exprés de la Constitución para incluir en la Carta Magna el principio de estabilidad presupuestaria, ante la oposición del resto de grupos.

Alonso y Sáenz de Santamaría se han empeñado en referirse a la reforma como una medida "solvente y contundente", en el caso del primero, y como "necesaria, oportuna y responsable", en el caso de la segunda, y han coincidido en calificar el pacto como "un acuerdo trascendental entre los dos grandes partidos con voluntad de Gobierno".

Pero se han encontrado con la dura oposición del portavoz del grupo catalán (CiU), Josep Antoni Duran i Lleida, quien ha asegurado que el acuerdo entre PSOE y PP "significa para su grupo una ruptura del proceso constituyente". "La Constitución es y existe gracias a todos", ha recordado Duran i Lleida, "y si fuese por algunos diputados, ni siquiera existiría".

El portavoz del grupo Esquerra Republicana-IU-ICV, Joan Ridao, también ha criticado la forma de plantear la modificación de la Constitución por parte de los dos grupos mayoritarios. "Se han olvidado del resto de fuerzas parlamentarias y de los ciudadanos", les ha acusado Ridao.

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El diputado de IU, perteneciente a ese mismo grupo, Gaspar Llamazares, quien ha comparecido en la tribuna de oradores con un pequeño cartel con la palabra Referéndum, ha coincidido con Duran i Lleida en que "la reforma rompe el consenso constitucional".

Llamazares cree que "se trata de un golpe a la Constitución, de una forma moderna de abrir un periodo de involución democrática" y ha acusado a socialistas y populares de sustituir "la soberanía de los ciudadanos por la soberanía de los mercados". El diputado de Izquierda Unida ha pedido además que "la inciativa se someta a referéndum".

El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, ha dicho que constitucionalizar la estabilidad presupuestaria es funesto y ha rechazado la reforma de la Carta Magna propuesta por PP y PSOE porque es un "atropello" a los procedimientos democráticos, es ineficaz, innecesaria y antieuropea.

Durante su intervención en el pleno del Congreso que debate la toma en consideración de la propuesta de reforma de la Constitución, Erkoreka ha adelantado que su grupo votará en contra y que presentará enmiendas con su propia propuesta.

Erkoreka ha reconocido que la disciplina presupuestaria como pauta básica de gestión económica es "excelente", pero como norma constitucional es funesta, ya que, a su juicio, "cuando lo que es de sentido común se expresa a través de normas rígidas y coercitivas pierde completamente el sentido".