Al Asad promete "mano de hierro" con los terroristas en su primer discurso desde junio
El presidente sirio no se dirigía a la nación desde hace siete meses
El presidente sirio, Bachar al Asad, ha prometido mano de hierro contra los "terroristas" en el primer discurso que da a la nación desde junio, en la Universidad de Damasco. Asad ha vuelto a responsabilizar a "fuerzas extranjeras" de planear las protestas en las que han muerto miles de personas durante los últimos diez meses (más de 5.000 fallecidos en la represión, según Naciones Unidas). Asad ha insistido en que "no va a haber flexibilidad con quienes aterroricen a los ciudadanos" y ha asegurado que no ha dado "ninguna orden a ninguna institución del Estado para disparar contra los ciudadanos". Asad asegura que va a liderar al país por el camino de la estabilidad y la "victoria total" y que no se plegará a las presiones de la "conspiración exterior".
Más información
- Los observadores de la Liga Árabe confirman que la violencia continúa en Siria
- Más de 20 muertos en varias ciudades sirias en distintos enfrentamientos entre protestantes y las fuerzas de seguridad
- Amnistía Internacional dice que el "cambio" en el mundo árabe lo ha provocado el pueblo, no fuerzas extranjeras
- Al menos ocho muertos y 25 heridos en un ataque en la ciudad Siria de Homs
- Siria concede una amnistía general a los presos detenidos durante las protestas
- La ONG Human Rights Watch pide que Occidente apoye la 'Primavera Árabe'
El presidente sirio ha prometido reformas políticas, ha anunciado la celebración de un referéndum para aprobar una nueva constitución a principios de marzo y ha adelantado que podrían celebrarse elecciones legislativas dos o tres meses después. Desde que empezaron las protestas Asad ha mandado mensajes de diálogo y promesas de reformas aunque durante este tiempo miles de personas han sido detenidas por asistir a las manifestaciones contra el régimen. Asad ha criticado también el papel de los medios de comunicación extranjeros, a los que ha acusado de "trabajar contra Siria para conducirla a un estado de destrucción".
En el discurso, emitido por la televisión nacional, Asad ha criticado la misión de observadores de la Liga Árabe y ha acusado (aunque sin nombrarlos) a algunos países miembros del organismo de querer tener un papel destacado a cambio de "encender toda la región". Ha calificado además a la Liga Árabe, por la suspensión de la participación de Siria el pasado noviembre y por la imposición de sanciones económicas, una medida sin precedentes, por incumplir el plan de paz diseñado por el organismo.
Las acusaciones de Asad llegan después de que el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogán, advirtiera ayer de una escalada en la crisis siria y abogó porque el Consejo de Seguridad de la ONU analizara la situación en su próxima sesión que se celebrará este martes. Erdogán es uno de los líderes árabes que ha criticado a Asad de manera más firme, pidiendo su dimisión e imponiendo sanciones a Damasco.