La movilidad, el nuevo futuro de los jóvenes

En España, casi la mitad de los jóvenes de entre 18 y 34 años siguen viviendo en la casa de sus padres, pero sólo un 10% quiere vivir así. ¿A los jóvenes españoles no les gusta la movilidad? ¿Por qué, si prefieren vivir fuera del domicilio familiar, siguen conviviendo con sus padres? Este miércoles, le hemos preguntado al catedrático de Sociología Enrique Gil Calvo si la movilidad tiene que ser el futuro de nuestros jóvenes y sobretodo: ¿cuánto cuesta la movilidad? ¿Se lo pueden permitir todos?

El sociólogo Enrique Gil Calvo sostiene que el inmovilismo de los jóvenes españoles tiene raíces coyunturales, porque "son la generación de la crisis, la que se ancla al hogar, a la familia y a la dependencia familiar". Sin embargo, también hay causas permanentes: "formamos parte de esos países del sur de Europa que son familiaristas. Todas las instituciones conspiran para generar esta persistencia de la dependencia de los jóvenes de la familia".

Cambio de modelo

Hasta el año '75, los jóvenes de clase media emigraban para estudiar en otras ciudades, mientras quienes pertenecían a la clase obrera cambiaban de ciudad para trabajar. Esa tendencia se ha invertido: "los jóvenes no se marchan. Buscan empleos precarios, pero siguen viviendo en casa de los padres", concluye Gil Calvo

El modelo tradicional de la emigración española se centraba en mano de obra sin cualificar. En la actualidad, la fuga de cerebros, comenzó con el programa Erasmus. Enrique Gil Calvo sostiene que "España exporta universitarios, pero son pocos en el volumen de población. Los chicos de clase obrera que antes podían emigrar, ahora no pueden. Constituyen los nuevos "ni-ni" que ni se casan, ni se van de casa".

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La movilidad es el futuro

Hay varias causas del inmovilismo juveni: la precariedad, la sobreprotección familiar, la preferencia cultural por la vivienda en propiedad y la dispersión universitaria. A pesar de ello, Enrique Gil Calvo cree que todos los jóvenes entre 20 y 30 años deberían apostar por la movilidad. De no hacerlo, "un joven no se construye su propia vida, deja que se la construyan". La experiencia de aprender a adaptarse a nuevos contextos es capital humano .