La izquierda consolidará la victoria de Hollande con una mayoría absoluta en la Asamblea Nacional
La derecha aguanta el empuje del Frente Nacional
Único punto negro en la jornada de este domingo: el 43% de abstención, lo que supone un nuevo récord y plantea la necesidad de revisar un calendario electoral en el que van a tener lugar cuatro escrutinios en el plazo de mes y medio.
Con el 46,77% de los votos, la izquierda tiene casi garantizada la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional en la segunda vuelta del próximo domingo. Las proyecciones en diputados dan al Partido Socialista y a sus aliados -Verdes y comunistas- entre 275 y 329 diputados para una mayoría que se establece en los 289 escaños.
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Sin embargo, no se registra una "oleada rosa" ya que la derecha realiza un resultado digno que le equipara en votos al Partido Socialista y que le otorgaría entre 227 y 266 escaños. Asimismo, las dos grandes formaciones frenan el avance del Frente Nacional que podría obtener hasta 3 diputados, entre ellos la propia Marine Le Pen que en su feudo de Henin Beaumont derrotó al líder de la izquierda radical Jeam Luc Merlenchon.
Hollande contará con una mayoría sólida en ambas cámaras
François Hollande tendrá no sólo una cámara baja con una mayoría amplia sino que también contará con el Senado. Un hecho inédito para la izquierda -no así para la derecha- que confiere al nuevo Presidente un amplio margen de maniobra para sacar adelante su agenda y defender la voz de Francia en Europa y en el mundo, en palabras de su primer ministro, Jean Marc Ayrault, que es uno de los 30 diputados elegidos en la primera vuelta.
Con él, otros cinco ministros mientras que el resto de gabinete, pese a las previsiones iniciales, tienen duelos asequibles y no deberán abandonar el gobierno en caso de derrota. Quien si parece casi eliminado de la vida política francesa es el líder centrista François Bayrou, cuyo partido cosechó un 2%.