El Ministerio del Interior elimina casi todos los escoltas del Poder Judicial

El plan de reducción de escoltas de Interior deja al Poder Judicial sin apenas escoltas. Sólo la cúpula de las instituciones judiciales y "un reducido grupo de magistrados y fiscales" tendrán agentes destinados a su seguridad. Unos 1000 escoltas pasarán a hacer labores de seguridad ciudadana

Interior suprime desde esta semana casi todos los escoltas del Poder Judicial, desde el Tribunal Supremo, Tribunal Constitucional, Fiscalía y Audiencia Nacional, sólo en este último Alto Tribunal la medida afectará a 250 agentes, ya que la mayoría de los recortes de escoltas afectan a la Audiencia, donde 16 fiscales y 25 jueces tendrán que utilizar el transporte público o su propio vehículo. Fuentes de la audiencia confirman a la cadena SER este malestar entre jueces y fiscales aunque reconocen que alguno de ellos utilizaba el servicio de seguridad como un mero taxi, y se quejan porque tendrán que desplazarse desde ciudades que están fuera de la Comunidad de Madrid.

La Fiscalía ha criticado en un duro comunicado que se les retire escolta y coche, mientras políticos y ex altos cargos lo tienen cuando desempeñan funciones de riesgo. Asegura la Fiscalía que aunque ETA ha anunciado el cese de su actividad, la banda no se ha disuelto y existen otros peligros procedentes del crimen organizado y el trafico de drogas. Asimismo, defienden que el servicio de escoltas es "imprescindible" y su desprotección compromete gravemente sus "condiciones" de trabajo. La medida se enmarca en el plan de reducción de escoltas del ministerio de Interior, que en su tercera ha defendido reducir en 1.010 agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado dejen de desempeñar la labor de escoltas para desempeñar tareas de seguridad ciudadana, como labores de patrulla o vigilancia.

De escoltas a seguridad ciudadana

El titular de Interior, Jorge Fernández Díaz defiende que el recorte se está llevando a cabo tras realizar un exhaustivo análisis de las situaciones de riesgo que, según las conclusiones, permite reordenar el sector de los escoltas al considerar que el riesgo y amenaza real de ETA es prácticamente nulo tras el anuncio del cese de actividad de la banda. Antes de la aplicación del plan, la plantilla estaba integrada por 1.456 agentes, 1.091 de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con la reducción, 1.010 policías y guardias civiles dejarán de desarrollar su labor de seguridad y pasarán a labores de seguridad ciudadana.

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