La ONU ya habla de un "conflicto armado" en Siria y Assad admite "un estado real de Guerra"
El mediador Kofi Annan, convocó al Grupo de Acción sobre Siria para el 30 de junio a fin de buscar una "posición común" sobre el conflicto
La comisión auspiciada por la ONU para investigar las violaciones a los derechos humanos en Siria ha empleado por primera vez el término "conflicto armado" para describir la situación en el país árabe, a la par el presidente sirio Bashar al Assad ha reconocido ante los miembros de su Gobierno que su país vive "en un estado real de guerra desde todas las perspectivas".
La comisión de la Organización de las Naciones Unidas ha denunciado que durante los enfrentamientos armados que se están desatando en varias regiones de Siria se producen "graves violaciones de los derechos humanos en el contexto de combates crecientemente militarizados".
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El brasilero Sergio Pinheiro, presidente de la comisión de la ONU ha explicado que "en algunas zonas la lucha reúne las características de un conflicto armado no internacional" y ha alertado que el régimen sirio ha cometido una serie de violaciones a los derechos humanos a una "escalada alarmante".
El informe de la comisión acusa a las fuerzas del régimen del bombardeo de ciudades, de registros casa por casa y de ejecuciones de civiles a lo largo de los tres últimos meses y asegura que dispone de evidencias y de una lista con los nombres de presuntos perpertradores con vistas a posibles acciones judiciales.
Al Assad: "Estamos en guerra"
Por su parte el presidente sirio Bashar al Assad ha criticado el papel de los países occidentales que exigen su dimisión y ha reconocido ante los principales funcionarios de su Gobierno la complicada situación que atraviesa su país.
"Estamos en guerra, todas las políticas, todos los actores y todos los sectores deben dirigirse a ganar esta guerra", ha dicho Al Assad, en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias SANA.
Al Assad además ha dejado en claro que de ser necesario se dará más importancia a sus relaciones comerciales con países orientales, comenzando por Rusia, su principal aliado en el Consejo de Seguridad de la ONU, y con Latinoamérica y África, antes de los países occidentales, a quienes acusó de pedir" sin "dar" nada a cambio.
"Aparentemente, el problema sólo se da con occidente. Mientras la mayoría de los países del mundo quieren crear relaciones con nosotros, nosotros, durante décadas, hemos querido impulsar los lazos económicos con quienes nos colonizaron directa o indirectamente. Siria debe mantener buenas relaciones con todos los países del mundo pero tenemos que saber cuáles son nuestros verdaderos intereses", ha concluido Al Assad.
El mediador de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, tiene previsto convocar al Grupo de Acción sobre Siria para el 30 de junio en Ginebra a fin de buscar una "posición común sobre los resultados que se proponen", según informó su oficina.
Siete personas mueren en ataque a televisión gubernamental
Hasta mientras la violencia no cesa en Siria, este martes murieron al menos siete personas, entre ellos tres periodistas, como consecuencia de un ataque armado a la sede de la televisión progubernamental Al Ikhbariya, cerca de Damasco.
Según la agencia SANA, los atacantes colocaron artefactos explosivos en las instalaciones de Al Ikhbariya "tras saquear y destruir los estudios del canal por satélite".
La televisión oficial siria mostró imágenes del lugar, donde podía verse la sede del canal destrozada por las explosiones con varias paredes derruidas y escombros en el suelo.
La comisión de la ONU había advertido del uso creciente de artefactos explosivos improvisados por parte de los grupos armados opuestos al régimen de Bashar al Assad.
El ministro sirio de Información, Omran al Zubi, calificó el ataque como "la peor masacre contra la prensa y la libertad de expresión por ejecutar a periodistas sirios a sangre fría y destruir con brutalidad el edificio de la televisión Al Ikhbariya".