Las mujeres de los mineros denuncian un trato humillante en sus registros en el Congreso
Asistían a la sesión plenaria donde se debatía sobre las ayudas al carbón
Las mujeres de los mineros que han accedido hoy a la tribuna del Congreso para presenciar el debate sobre el recorte en las ayudas a las minas denuncian que la policía se ha excedido en su registro. Dicen incluso que les han obligado a bajarse los pantalones.
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Escoltadas hasta el Congreso de los Diputados, las mujeres mineras - compañeras y esposas de mineros, otras trabajadoras del sector- intentaban acceder al Parlamento para seguir la sesión plenaria del miércoles. Los cuerpos de seguridad del hemiciclo les solicitaron el documento de identificación y les pidieron que si portaban camisetas u objetos reivindicativos se deshicieran de ellos y los guardarán en unas taquillas. Hasta aquí el procedimiento habitual. Pero tras el arco de seguridad, una por una pasaron por un biombo. Allí las mujeres según relatan a la Cadena SER, fueron sometidas a un cacheo y registro humillante.
"Me mandaron quitarme las playeras, las plantillas de los zapatos. Me quitaron la camiseta, le dieron la vuelta. Me miraron el sujetador. Me miraron por detrás por delante", explicaba Silvia, minera de la Cuenca del Nalón. "Me hicieron bajarme los pantalones y con ellos bajados me hicieron descalzarme. Me tocaron los tobillos, las plantas de los pies", contaba Raquel. "Me dijeron que si me podía bajar los pantalones un poco más de las rodillas. Me miraron por delante y por detrás, y me hicieron descalzarme, relataba Beatriz.
Desde Congreso de los Diputados aseguran que el procedimiento con estas mujeres ha sido exactamente igual al que se aplicó a la demás personas que accedieron a la Tribuna de invitados, y niegan cualquier trato vejatorio.
Las mujeres que habían sido invitadas por el grupo socialista para seguir la sesión de Pleno, terminaban expulsadas de la tribuna de invitados. Como es habitual, el presidente del Congreso, Jesús Posada, mandaba su desalojo cuando comenzaron a lanzar gritos durante la intervención del portavoz adjunto del Grupo Popular, Rafael Hernando, sobre el conflicto laboral de los mineros.
