El informe del Instituto Toxicológico confirma que los restos óseos son humanos
Los expertos continúan redactando el informe encargado por el magistrado José Luis Rodríguez Lainz. El dictamen llega a las conclusiones del forense Francisco Etxeberría y José Luis Bermúdez de Castro.
Un equipo de al menos cinco expertos concluye que no hay ninguna duda sobre la procedencia humana de los restos encontrados en la finca de Las Quemadillas, en Córdoba.
El Instituto Nacional de Toxicología ya ha concluido la revisión y análisis de los restos óseos recogidos de la hoguera de la finca de Las Quemadillas, en Córdoba. Sin ninguna duda, aseguran fuentes de la investigación y forenses, se trata de restos óseos de humanos. Concretamente, habría un menor de seis años, claramente representado.
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El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses avala así las investigaciones de los antropólogos forenses Francisco Etxeberría y José María Bermúdez de Castro, cuyos informes incorporados al sumario dieron un vuelco a la investigación de la desaparición de los niños de Córdoba al asegurar que se trataba de humanos y no de restos animales como aseguraba el primer informe de la Policía Científica.
El Instituto Nacional de Toxicología ha reforzado el equipo con otros profesores externos de la Universidad Complutense de Madrid, entre ellos el profesor José Antonio Sánchez Sánchez, director de la Escuela de Medicina Legal de la UCM. El estudio está concluido desde el viernes pasado y ahora los expertos terminan de redactar un informe pericial técnico para remitirlo al magistrado José Luis Rodríguez Lainz que lo solicitó como la prueba definitiva para el análisis de los huesos encontrados.
El siguiente paso, una vez que el juez reciba las conclusiones de Toxicología será averiguar si es posible extraer material genético de los restos encontrados. Para ello, el juez solicitará un informe del servicio de biología del Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Santiago de Compostela, donde un equipo dirigido por el especialista Ángel Carrecedo se encargará de la investigación genética en busca del ADN. El forense Francisco Etxebarría ya advirtió en su informe de la dificultad de encontrar ADN en unos restos calcinados.
