Feria Valencia celebra una macrofiesta con la seguridad reforzada
El macrofestival de música electrónica Black Lotus ha vendido 6.500 entradas de un aforo total de 12.600
Un guardia de seguridad comprueba el DNI de una joven en la entrada de la macrofiesta de música electrónica que se celebra en Valencia. EFE/Juan Carlos Cárdenas(EFE/Juan Carlos Cárdenas)
La consellería ha dispuesto un refuerzo de 45 agentes de la policía autonómica, que controla, junto a la policía local y nacional, el exterior de la fiesta.
Todas las medidas están dispuestas. La seguridad se ha reforzado, aunque los organizadores se afanan en asegurar que el plan de seguridad hecho desde el principio ya contemplaba todas las medidas que exige la Administración valenciana, considerada como una de las más estrictas.
Lo cierto es que desde las características del local, hasta los controles que se anuncian, y los refuerzos policiales que se han dispuesto, todo parece indicar que esta fiesta va a ser bien distinta a la de Madrid Arena.
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El local es una gran nave de una sola planta, totalmente diáfana, con 10 puertas de nueve metros cada una a lo largo de todo el pabellón, con salida directa a la calle. No hay escaleras, no hay túneles, no habrá puertas cerradas. "Estas puertas desalojan 1.900 personas por minuto y según la normativa vigente en Valencia nos obligan a tenerlas abiertas en todo momento durante el evento", dice Jesús Abengozar, uno de los organizadores.
Pero además, la empresa que va a llevar la seguridad no quiere dejar pasar ni una. Va a haber dos zonas de control distintas. En la primera, control de identidad y de edad, cacheo y registro de bolsos y mochilas, y segundo control para certificar que las entradas son auténticas.
Y, aunque los organizadores de la fiesta, una empresa que rige un local en la localidad de Sueca (Valencia), quieren desligarse lo más posible de lo sucedido en Madrid, reconocen que han reforzado algo la seguridad prevista, que ya era muy estricta, como estricta es la normativa de la Generalitat. "Hemos ampliado un poquito pero ya estaba todo como las normativa nos pedía ya que son muy estrictas las medidas de seguridad que hay en Valencia", reconoce Abengozar.
También la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia han querido comprobar que todo estaba correcto. Durante toda la mañana del viernes, técnicos y responsables de la Generalitat y del Ayuntamiento, incluso el concejal de seguridad, Miguel Domínguez, inspeccionaron exhaustivamente todo el recinto, sus accesos y el escenario instalado. Finalmente, no fue hasta la tarde del viernes cuando la consellería de Gobernación certificó que el evento cumplía todas las normativas y concedió la licencia.
Además, la consellería ha dispuesto un refuerzo de 45 agentes de la policía autonómica, que controla, junto a la policía local y nacional, el exterior de la fiesta.
