Los recortes sociales más duros de la historia

Nunca se había recortado tanto en tan poco tiempo. El Estado del Bienestar, construido piedra a piedra durante 40 años, ha sufrido en solo doce meses un gravísimo deterioro. El gobierno de Rajoy ha aprovechado la crisis económica y la política de austeridad para cambiar el modelo de sanidad y el de educación públicas favoreciendo, según la oposición, a los intereses de las empresas privadas.

La sanidad ha dejado de ser universal, se ha extendido el copago y han dejado de financiarse medicinas a raíz del recorte de los 6.000 millones de euros. Por primera vez los pensionistas tienen que pagar por sus medicinas, los inmigrantes 'sin papeles' han perdido su tarjeta sanitaria y el derecho a la cobertura y más de cuatrocientos medicamentos han salido del sistema público. Además el gobierno prepara una revisión de la cartera de servicios sanitarios que supondrá la restricción de algunas prestaciones y la aplicación del copago a los productos ortoprotésicos como las sillas de ruedas o muletas, a los alimentos especiales o a las ambulancias no urgentes. No hay que olvidar tampoco que muchas comunidades autónomas han metido también sus propias tijeras con el cierre de camas, de quirófanos, reducción de personal y están avanzando significativamente en la privatización de hospitales. El último y más claro ejemplo es el de la Comunidad de Madrid gobernada por Ignacio González.

No solo el desmantelamiento de la sanidad ha caracterizado este primer año de Rajoy. Desde que está en la Moncloa, la educación pública también ha sufrido un duro golpe con el recorte de más de cinco mil millones de euros. Este reajuste ha provocado el despido de cuarenta mil profesores, según la oposición y los sindicatos. Hay menos maestros y sin embargo hay más alumnos por aula. Han desaparecido las ayudas para libros, comedor y transporte escolar. Se han reducido las becas, han subido las tasas universitarias y se ha eliminado el programa de educación infantil. El ministro Wert, con sus recortes, con sus reformas y con sus declaraciones, se ha enfrentado a toda la comunidad educativa. Es el ministro peor valorado de un gobierno en el que todos sus miembros suspenden.

Los recortes han sido especialmente severos con la Ley de Dependencia que prácticamente está paralizada. Se han suprimido vías de financiación de esta norma y casi un millón de personas dependientes se han visto perjudicadas. 400.000 se han quedado de momento sin ayudas. A 435.000 cuidadoras familiares se les ha rebajado la paga un 15% y 180.000 se han quedado sin la Seguridad Social.

El gobierno de Rajoy planea también recortes ideológicos. El más importante, el del aborto. El ministro Gallardón quiere hacer retroceder la legislación al menos 25 años y parece empeñado en alejarnos lo más posible de Europa. En su reforma de la actual ley de plazos la interrupción voluntaria del embarazo dejará de ser un derecho de las mujeres y volverá a ser un delito.

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