El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha pedido en su declaración institucional sobre el caso Bárcenas la dimisión del presidente del Gobierno Mariano Rajoy. Una decisión que ha tomado junto a los miembros de su partido tras las palabras del sábado del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en las que aseguró que nunca ha recibido ni repartido dinero negro. Alfredo Pérez Rubalcaba ha calificado las explicaciones de Rajoy como «insuficientes» y que le han dejado «sin credibilidad para liderar el país». El líder socialista ha explicado que nos enfrentamos a «una crisis territorial y a una crisis política que amenaza a la credibilidad de nuestras instituciones representativas más importantes», por lo que pide la dimisión de Mariano Rajoy. «En las últimas semanas se han conocido muchas informaciones sobre prácticas irregulares y presuntas irregularidades cometidas en la financiación del PP», unas informaciones que el líder de los socialistas ha recordado están «relacionadas directa o indirectamente con el caso Gürtel». Un caso en el que todavía los tribunales no han terminado de pronunciarse. Rubalcaba entiende que las informaciones publicadas por «El País» y «El Mundo» son de «extraordinaria importancia» y que han creado alarma social al afectar tanto al Partido Popular como al presidente hasta tal punto, que no nos encontramos ante «un caso de corrupción, si no ante una red corrupta que llega hasta el mismo corazón del PP». Sobre este asunto, ha explicado que «merman la credibilidad de los que han pedido durante un año recortes que no aparecían en su programa». Por ello, y por las dudas que aparecen sobre su persona, Rubalcaba le ha pedido hoy «que abandone la presidencia del Gobierno y de paso a otro presidente». «Un Gobierno fiable, un Gobierno fuerte, un Gobierno confiable y el del señor Rajoy ha dejado de serlo, empezando por su propio presidente». Después de afirmar que Rajoy es un «lastre» para España, Rubalcaba ha opinado que el jefe del Ejecutivo no puede dirigir España en un «momento tan delicado». Además, ha querido recordar al Gobierno, y en especial a Mariano Rajoy, que «la falta de credibilidad de su Gobierno no es un problema que tiene con la oposición, sino con miles de ciudadanos que ayer esperaban de él explicaciones». Por todo esto, Alfredo Pérez Rubalcaba ha declarado que «el señor Rajoy se ha convertido en un problema más añadido» a la crisis económica y territorial, «una crisis de moral pública con su actuación de ayer». No ha dudado en afirmar que Rajoy «no ayudará a acabar con la crisis, la agravará». Y aunque ha reconocido que la moción de censura y las elecciones anticipadas «son posibilidades que están al alcance de la oposición», para el PSOE «en este caso lo que procede es un cambio en la presidencia del Gobierno». Entiende que Rajoy no puede dirigir el país y que «por no poder no puede ni querellarse contra el señor Bárcenas, no puede cesar a sus ministros y no puede despegarse de la sombra de sospecha». Preguntado por los datos de intención de voto conocidos este domingo, en los que se rebela el descenso del PP y el PSOE, y un aumento notable en partidos como IU o UPyD, Rubalcaba ha explicado que todavía no ha visto las encuestas. «No he visto las encuestas, hoy solo quería pensar en esto». «Todo el mundo ha mentido menos él y su partido» Haciendo referencia a las palabras de ayer de Mariano Rajoy, Rubalcaba ha recalcado que «por fin compadeció ayer», aunque no admitió preguntas de los periodistas y aprovechó para negarlo todo. Una rueda de prensa donde el presidente «no explicó, acusó. Todo el mundo ha mentido menos él y su partido». Ha mostrado su asombro porque el presidente se ha augurado a hablar de «una operación para desestabilizar al Gobierno», cuando lo que «España esperaban de él no eran ataques, si no explicaciones». Dice que por ejemplo, la ciudadanía esperaba ayer de Rajoy que hablase de Bárcenas, «uno de los que se ha beneficiado de su amnistía fiscal». «No esperaban una acusación hacia los medios, sino hacia su ex tesorero» insiste.