Los niños, en el coche, mirando hacia atrás
La Reglamento General de Circulación vigente no recoge la orientación en la que se tienen que colocar las sillas de retención infantil
La Dirección General de Tráfico propone que la silla de retención infantil se coloque en el sentido contrario al de la marcha cuando la vayan a usar niños menores de cuatro años o que pesen menos de 18 kilos. Es una de las propuestas que la DGT ha incluido en el borrador de reforma del Reglamento General de Circulación.
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Según todos los expertos, publica la Revista de la DGT, que los menores viajen el mayor tiempo posible, hasta los 4 años aproximadamente, en sentido contrario a la marcha, reduce el riesgo de sufrir lesiones en caso de impacto frontal. El motivo es que si el niño va sentado en el sentido inverso a la marcha, las fuerzas que se registran en caso de impacto se distribuyen por todo el cuerpo y no se concentran en la zona del cuello como ocurre cuando viajan en sentido de la marcha. No debemos olvidar que mientras la cabeza de un adulto representa el 6% del peso de su cuerpo en el caso de los niños pequeños la cabeza supone un 25%.
Según un reciente estudio de RACE y Cibex en colaboración con la DGT, colocar a los niños en una "sillita" en sentido contrario a la marcha cuando se viaja en coche puede reducir hasta en un 75% el riesgo de que los menores sufran lesiones en caso de accidente de tráfico. Entre el año 2001 y 2011, un total de 1.150 menores de 14 años murieron en carretera y cerca de 60.000 sufrieron alguna lesión como consecuencia de un accidente de tráfico.
La reforma del Reglamento General de Circulación, que va a incluir también la modificación de los límites de velocidad en carreteras secundarias y una regulación específica para las bicicletas, puede cambiar también los permisos para viajar delante. Actualmente, el reglamento establece que los menores de 12 años pueden viajar en los asientos delanteros de un vehículo si van colocados en "dispositivos homologados al efecto" o si su estatura es igual o superior a 135 centímetros. El borrador ya no contempla la posibilidad de que los niños puedan viajar en esos asientos si no superan la estatura reglamentaria.
El proyecto está siendo revistado por el Gobierno, después de que la DGT haya terminado el borrador, tendrá que ser evaluado ahora por el Ministerio de Interior y el resto de departamentos del Ejecutivo antes de que pueda ser aprobado en el Consejo de Ministros.
