El Gobierno dificulta las prejubilaciones obligando a pagar más a las empresas
El texto del Consejo de Ministros afecta a los parados de más edad, porque modifica el subsidio de mayores de 55 años
El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes un decreto que tiene como objetivo hacer que las empresas se piensen dos veces recurrir a las prejubilaciones. El método: ampliar el universo de compañías que tienen que abonar los costes en los que incurre el Estado (paro, subsidios, ...) cuando se despide a trabajadores mayores. También se endurece el acceso al subsidio para parados mayores de 55 años, una medida que busca asimismo que las empresas no recurran a las prejubilaciones, pero que puede tener como consecuencia que se vean perjudicados los parados más mayores.
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Según fuentes gubernamentales, el Gobierno quiere endurecer la llamada "enmienda Telefónica", la disposición legal que obliga a las empresas grandes con beneficios a pagar el paro de los mayores de 50 años a los que despidan. Estas fuentes señalan que se endurecerá porque también tendrán que pagar las empresas que ahora estén en pérdidas, pero que vuelvan a los beneficios en los próximos cinco años.
Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha explicado las intenciones del Ejecutivo. ''Tenemos que aproximar la edad legal de jubilación a la edad real'', ha dicho Báñez.
La otra gran vía por la que el Gobierno quiere desincentivar el despido de los más mayores es aumentando los requisitos de renta para acceder al subsidio de paro para mayores de 55 años. La lógica del Gobierno es ésta: las empresas que prejubilan cuentan con ese subsidio (de 426 euros al mes hasta que el afectado llegue a la edad de jubilación anticipada) para pagar menos a sus empleados prejubilados. Se trata de forzar a las empresas a pagar más o, visto de otra manera, que no trasladen al erario público los costes de su decisión de despido.
"El gasto en pensiones representa un 10% del PIB", ha añadido Báñez. "Las cotizaciones sociales pagarán solo las pensiones contributivas; el resto se cubrirán vía impuestos".
Posibles afectados: jóvenes y mayores no prejubilados
Estas medidas, que buscan que las empresas no recurran tanto al despido de trabajadores mayores vía prejubilaciones, conllevan el riesgo de perjudicar a otros colectivos. El primero, el de los trabajadores más jóvenes: al aumentar el coste potencial de despedir a los trabajadores mayores, la empresa puede verse incentivada a deshacerse de los más jóvenes.
El segundo colectivo que puede verse afectado es el de los trabajadores mayores de 55 años que estén en el paro, pero no a consecuencia de una prejubilación. En este caso, bajar el listón de rentas a partir del cual no se puede acceder al subsidio puede dejar a este tipo de trabajadores en una situación muy comprometida: sin trabajo y sin una ayuda a la que ahora podrían, hipotéticamente, acceder. Habrá que ver si el Gobierno protege a estos colectivos con alguna disposición en el decreto.
El texto que contempla estas medidas acompañará al endurecimiento del acceso a las jubilaciones anticipada y parcial que también tiene previsto aprobar el Consejo de Ministros este viernes.
