Jaume Matas quema su último cartucho
El juez interroga a varios testigos propuestos por el expresidente de Baleares para tratar de justificar los convenios con el Instituto Nóos
Jaume Matas se lo juega todo a una carta. El juez que investiga el fraude del Instituto Nóos interroga este martes a seis testigos, a propuesta del que fuera presidente balear, para que acrediten las bondades de las dos jornadas de turismo y deporte que se celebraron en las Islas y que costaron más de dos millones de euros. Entre los testigos, figura el presidente de los empresarios de Baleares.
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El expresidente de Baleares, Jaume Matas, quema su último cartucho para justificar porqué la administración que dirigía firmó dos convenios con el Instituto Nóos para celebrar sendas jornadas de turismo y deporte a cambio de más de dos millones de euros. El juez que investiga el fraude de esta entidad sin ánimo de lucro, José Castro, aceptó citar a declarar a seis testigos solicitados por Matas con la intención de que acrediten la utilidad que tuvieron para la comunidad autónoma los convenios firmados. Entre ellos figura Josep Oliver, presidente de los empresarios de las islas.
Castro, sin embargo, ha rechazado la solicitud del exdirigente del partido popular para cursar 28 comisiones rogatorias. En un auto el juez sostiene que, de hacerlo "el final de la instrucción se situaría en un horizonte tan lejano como inadivinable".
Urdangarin contra las cuerdas
La situación procesal de Iñaki Urdangarin también sufrió un duro golpe con la ronda de declaraciones de este lunes. Quien fuera su amigo íntimo y apoderado en la empresa que comparte con la infanta Cristina, marcó distancias por primera vez con él. Mario Sorribas reconoció ante el juez que él era el único empleado de Aizóon, en contra de lo que ha venido sosteniendo el duque de Palma. Añadió que Urdangarin siguió al frente de la red de fundaciones que constituyó mucho después de que la Casa Real le ordenara que se apartara de sus negocios. Un extremo que también confirmó en su declaración el empresario que conectó al Instituto Nóos con la administración pública valenciana, Miguel Zorío. Y como no hay dos sin tres, un tercer testimonio puso contra las cuerdas al yerno del rey. Robert Cocks subrayó que puso a disposición de la trama una cuenta suya en Suiza a la que fueron a parar 375.000 euros por un contrato con Aguas de Valencia de los que, según la investigación, Iñaki Urdangarin se habría embolsado 140.000 euros.