Varapalo judicial a las "cláusulas abusivas" de Ryanair
Un juzgado madrileño da la razón a la OCU y declara nulas cláusulas de la aerolínea de bajo coste
El juzgado de lo Mercantil nº 6 de Madrid ha dictado una sentencia que declara nulas una serie de cláusulas incluidas en los billetes que emite Ryanair, en las que solo se somete a los tribulanes irlandeses, no admite documentos como el libro de familia o el carnet de conducir, no acepta el pago en efectivo o cobra 40 euros por imprimir la tarjeta de embarque.
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Con relativa frecuencia se dan casos de familias que se quedan en tierra porque Ryanair no admite el libro de familia para acreditar la identidad de algún menor y no le deja subir al avión. Un juzgado madrileño ha declarado nula esta cláusula, y otras siete incluidas por la aerolínea en sus contratos de transporte. Las considera abusivas, dando la razon a la OCU, que en 2012 inició una ofensiva judicial contra las cláusulas de distintas aerolíneas que operan en España.
La OCU señala que el juzgado de lo mercantil nº 6 considera abusiva también la cláusula de Ryanair que exige a los pasajeros que presenten sus demandas judiciales contra la compañía en Irlanda. Que cobre 40 euros por imprimir la tarjeta de embarque. Que exija el pago con tarjeta bancaria, sin aceptar el efectivo. Que pueda negarse a embarcar a un pasajero o su equipaje con la única condición de que antes se lo haya comunicado. Que pueda cobrar por "almacenar" un equipaje si no es recogido tan pronto llega a su destino. O que pueda modificar los horarios de los vuelos de forma unilateral.
Sentencia recurrible
La sentencia es recurrible, Ryanair no ha aclarado aún si piensa hacerlo u optará por eliminar ya esas cláusulas. Desde la OCU, su portavoz Ileana Izverniceanu apunta que, en caso de recurso, la Audiencia Provincial de Madrid puede tardar en torno a año y medio en resolver el caso. Hasta entonces Ryanair podría optar por mantener sus cláusulas.
La organización de consumidores recuerda que una sentencia anterior, de la Audiencia Provincial de Barcelona, dio por buena la cláusula que permite cobrar 40 euros por imprimir la tarjeta de embarque. En este caso, si Ryanair recurre esta nueva sentencia y la audiencia madrileña contradice a la de Barcelona, el caso podría terminar en el Supremo, demorándose la resolución final.
A la espera de cómo termina la vía judicial en todo este asunto, Ileana Izverniceanu considera que la posición adoptada por el juzgado madrileño "es un paso vital, con una sentencia radicalmente clara, que pone coto a la forma de actuar de la aerolínea contra la que se dirigen el mayor número de reclamaciones de los usuarios". Pero lamenta que las autoridades de consumo "miren para otro lado ante estos atropellos, cuando tienen competencias para imponer sanciones".
- <a name="despiece1"></a>Ryanair recurrirá la sentencia