Bankia deberá indemnizar a dos preferentistas por ocultarles el estado de las cuentas de Caja Madrid
El auto, novedoso en los argumentos, da por hecho que Caja Madrid llevó a cabo una agresiva campaña de captación de fondos con el fin de sanear su balance
Sucursal de Bankia(CADENA SER)
Un juzgado de Madrid condena a Bankia a indemnizar a devolver 50.000 euros a dos ancianos por venderles preferentes, ocultándoles el verdadero estado de las cuentas de caja Madrid e impidiéndoles revocar la orden de compra una vez fue rebajado el rating de solvencia de la entidad.
Más información
- Condenan a Bankia a devolver 100.000 euros por preferentes a un jubilado con demencia senil
- Una fiscal pide enjuiciar por estafa a dos trabajadores de Caja Madrid por vender preferentes a ancianos
- El Banco de España oculta al juzgado los informes fundamentales sobre las preferentes
- El Estado inicia su salida de Bankia al poner a la venta un 7,5% de la entidad
Nueva sentencia a favor de los preferentitas. Un juzgado de Madrid ha condenado a Bankia a indemnizar a devolver 50.000 euros a dos ancianos por venderles preferentes, ocultándoles el verdadero estado de las cuentas e impidiéndoles revocar la orden de compra una vez fue rebajado el rating de solvencia de la entidad. Según el auto, Caja Madrid llevó a cabo una agresiva campaña de captación de fondos para sanear su balance.
El magistrado asegura que los ancianos no conocían "los conceptos y el funcionamiento del mercado primero y secundario, esencia a efectos de decidir dónde, de qué forma y en qué condiciones podían venderse los títulos de participaciones cuya liquidez casi inmediata al 100% indudablemente se les garantizaba cuando se les comercializaba". Difícilmente los demandantes, continúa, "personas de más de 70 años" iban a aceptar contratar un producto cuya amortización dependía exclusivamente de la entidad emisora al cabo de 5 años, y del que pudiera ocurrir que no percibieran las remuneraciones ofrecidas.
Es más, una vez contratado el producto, Caja Madrid no comunicó a las sucursales la posibilidad de revocación. Para el juez, la firma de los clientes de una "profusa y compleja documentación" debio ir acompañada de la información verbal necesaria "no sólo de las virtudes de las preferentes", su "alta rentabilidad y la 'garantía' de Caja Madrid, sino también de los inconvenientes y riesgos reales inherentes al producto financiero".
La entidad no actúo con arreglo a la buena práxis bancaria, ni cumplió los estándares de buena fe y transparencia al comercializar un producto de alto riesgo que no era "coherente con el perfil netamente conservador de clientes minoristas", al igual que tampoco cumplieron con la normativa "MidFit" -posibilidad de revocación del contrato-.
Bankia deberá indemnizar a los dos ancianos con 50.000 euros además de las costas del procedimiento. El auto es recurrible.
Según el abogado de la defensa, Pablo Castañeda, "la sentencia marca un hito porque aunque los jueces insisten en que hay que mirar caso por caso, el juez advierte y se contrasta que hubo una contratación masiva y agresiva de participaciones preferentes, ocultando el verdadero estado financiero de la entidad"
