Rusia cuestiona la legitimidad del nuevo presidente de Ucrania
El Ministerio de Exteriores ruso acusa a los países occidentales de no preocuparse por Ucrania y de actuar en función de sus intereses
Rusia ha cuestionado la legitimidad del nuevo presidente de Ucrania, Alexandr Turchinov, después de que el sábado el parlamento destituyera a Yanukovich. Las nuevas autoridades ucranianas han dictado una orden de busca y captura contra Yanukóvich al que acusa de asesinato masivo. El primer ministro ruso, Dimitri Medvedev, ha criticado a la Unión Europea por haber reconocido ya al nuevo presidente. El ministro de Exteriores español, García Margallo, ha dicho que hay que evitar entrar en una competición entre la Unión Europea y Rusia por Ucrania.
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Rusia insta a todas las partes implicadas en la crisis de Ucrania a volver al marco legal y frenar a los "extremistas" que aspiran a hacerse con el poder. En un comunicado colgado en su página web, el Ministerio de Exteriores ruso acusa, además, a los países occidentales de no preocuparse por Ucrania y de actuar en función de sus cálculos geopolíticos.
"Hacemos un llamamiento insistentemente a todas las partes relacionadas con la crisis en Ucrania para que ejerzan la máxima responsabilidad y no permitan que la situación siga degradándose, así como que se vuelva al marco legal y se frene de manera firme a los extremistas que aspiran a hacerse con el poder", señaló el Ministerio.
La Cancillería también señala que "da la impresión de que el acuerdo alcanzado el 21 de febrero (entre la oposición y el aún entonces presidente Víktor Yanukóvich) con la aprobación silenciosa de sus patrocinadores extranjeros era sólo una cortina de humo para continuar con el guión del traspaso de poder en Ucrania mediante hechos consumados".
El Ministerio subraya que le preocupan "especialmente los intentos de que las estructuras internacionales, como la Secretaría General de la ONU, justifiquen esta línea de actuación". Además, señala que Moscú no ve una preocupación verdadera de algunos países occidentales por Ucrania, sino más bien intereses geopolíticos.
"Es obligado señalar que en la posición de algunos de nuestros socios extranjeros se observa, no una preocupación por el destino de Ucrania, sino cálculos geopolíticos unilaterales", añade el comunicado. Y subraya que no se ha escuchado a Occidente condenar "las acciones criminales de los extremistas, incluidas sus manifestaciones nazis y antisemitas". El Ministerio también expresó su preocupación por la "legitimidad" de las medidas adoptadas por la Rada (parlamento) ucraniano.