La policía israelí investiga si la muerte de un joven palestino se debe a una venganza

Se trata de la principal vía de investigación dado el ambiente antiárabe reinante en la ciudad, propiciado por el entierro este martes de los tres estudiantes judíos desaparecidos en Cisjordania, hallados muertos. Los agentes no descartan que pueda ser "un crimen de honor".

Testigos afirman que anoche vieron como un chico era obligado a entrar en un coche a la salida de la mezquita en el barrio de Shuafat, cerca de una zona comercial situada en Jerusalén Este. El portavoz de la policía, Micky Rosenfeld, confirmó que habían recibido la denuncia de que un chico fue obligado a entrar en un vehículo y podría haber sido secuestrado.

"La policía descubrió el cuerpo en un bosque de Jerusalén y ahora se investiga si hay conexión entre el chico desaparecido y el cuerpo hallado", comenta el portavoz de la policía israelí, agregando que agentes y miembros de los servicios secretos internos se ocupan de la investigación.

La noche del martes, cuatro adolescentes israelíes fueron detenidos tras atacar a dos palestinos que trabajaban en el centro de Jerusalén, donde decenas de personas se manifestaron al grito de "muerte a los árabes", pidiendo venganza por el asesinato de los tres estudiantes judíos en Cisjordania.

Según medios locales, agentes de policía arrestaron a un joven judío enmascarado cuando trataba de atacar a un empleado de una famosa cadena de comida rápida estadounidense, situada en la parte peatonal de la ciudad santa.

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Además, otros tres adolescentes fueron también detenidos cuando intentaban una acción similar contra un palestino de origen beduino, empleado en un comercio del corazón comercial de Jerusalén, donde trabajan numerosos palestinos.

La edición digital del diario Yediot Aharonot, informó de enfrentamientos en la calle Jaffa, pulmón comercial de Jerusalén. Manifestantes bloquearon los accesos, trataron de entrar en el mercado de Menahe Yehuda y gritaron consignas como "muerte a los árabes", exigiendo a Israel que vengue el asesinato de los tres jóvenes estudiantes.

Un joven tuvo que ser rescatado de en medio de la manifestación en la calle Jaffa, por parte de un policía israelí que pidió refuerzos para evacuarlo. Los manifestantes intentaron atacarle y la policía recurrió la fuerza para evitarlo.

El lunes, la policía israelí elevó la alerta de sus fuerzas al nivel 3, de un total de 5, tras conocer el hallazgo de los cadáveres de los tres jóvenes judíos, secuestrados el pasado 12 de junio cuando hacían autostop en Cisjordania; huyendo del deterioro de la situación y de posibles represalias por nacionalistas judíos.

Confirman que la policía había extremado la vigilancia en todo el país a raíz de "varios factores", entre ellos el deterioro de la situación en el sur de Israel tras la caída de cohetes disparados desde Gaza, que la noche del martes se volvieron a repetir. Además del temor de que nacionalistas judíos tomen la justicia por su mano, vengando el asesinato de los tres adolescentes, sepultados ayer en un multitudinario entierro en la ciudad de Modin, entre Jerusalén y Tel Aviv, tras 19 días de búsqueda.

La medida se ha traducido en un mayor número de patrullas por todo el país, según el portavoz. Una de ellas, rescató el mismo lunes, a un empleado palestino de una pizzería de Jerusalén; tras verse acosado por decenas de clientes que protestaron por su presencia en el local y exigían que se marchara inmediatamente.

Las miradas apuntan al grupo Tag Mehir, que significa "El precio a pagar", como el más propicio para una acción de venganza, con un largo historial de ataques contra objetivos palestinos a sus espaldas.