Cierre de 15.000 camas en los hospitales públicos durante los meses de verano

Es una práctica habitual en verano que las Comunidades Autónomas utilizan para ahorrar recursos pero el cierre va en aumento desde que comenzó la crisis económica. El sindicato de enfermería Satse calcula que este 2014 los hospitales cerrarán entre los meses de julio, agosto y septiembre unas 15.000 camas de las 113.518 que hay en el Sistema Nacional de Salud.

Las Comunidades Autónomas justifican el cierre de camas en la "optimización de recursos" y consideran que no es razonable mantenerlas todas operativas cuando se reducen las demandas y necesidades de hospitalización. Dicen que en el período estival dejan de utilizarse hasta un 25%.

Pero el sindicato Satse destaca el perjuicio de la medida para los pacientes y los profesionales. "Aumentan las listas de espera, se produce un retraso de las pruebas diagnósticas y de las intervenciones, se saturan las urgencias, se incrementa la carga de trabajo para los sanitarios que no se van de vacaciones y sobre todo, hace crecer el desempleo en un sector, el de la enfermería, que nunca había registrado la actual cota de paro", señala sobre las consecuencias Rafael Reig, el secretario de acción sindical de Satse.

Los datos que ha recabado el sindicato apuntan a que en Madrid cerrarán este verano 1.800 camas, en Andalucía 2.900, en Euskadi 1.145, en Castilla-La Mancha 900, en Baleares 300, en Asturias 175 y en La Rioja 50. Oficialmente se ha comunicado también por parte de los respectivos gobierno autonómicos el cierre de 1.095 camas en Galicia y 468 en Aragón. En Murcia cerrarán 558, en Cantabria 78 y otras fuentes sindicales señalan que en Cataluña el cierre superará las 3.000.

Los sindicatos temen que estos cierres se conviertan después del verano en recortes y por eso entienden que este verano haya más ruido y más protestas contra la medida no solo de los profesionales sanitarios sino también de los pacientes. En las últimas semanas y días se han intensificado en Cataluña, con el epicentro en el Hospital de Bellvigte; en Galicia, fundamentalmente en Vigo y en el Complejo Hospitalario de León y el Bierzo.

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