No hubo reunión de seguridad antes del partido entre Atlético y Deportivo

No hubo reunión de seguridad previa al Atlético de Madrid - Deportivo. Esa fue la causa por la que la reyerta entre los ultras de los dos equipos pilló a las fuerzas de seguridad por sorpresa y por la que se extendió de forma dramática, hasta la muerte del seguidor deportivista Francisco Javier Romero Taboada, alias Jimmy.

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Según ha explicado José Ramón de la Morena en 'El Larguero', antes de todos los partidos es habitual mantener una reunión de seguridad organizada por el equipo anfitrión. El problema es que esta reunión no se produjo, lo que impidió la coordinación de todos los agentes implicados en la seguridad del encuentro: club, Policía Nacional, Policía Municipal, bomberos, servicios de emervencias...

En estas reuniones, cada uno de los agentes exponen las circunstancias que pueden afectar a la seguridad del encuentro en función de las personas que se espera que acudan al partido. Una vez que la reunión finaliza siempre hay un acta firmada por todos los asistentes.

Cuando los partidos son declarados de alto riesgo, ese encuentro se celebra en la Delegación del Gobierno. Cuando no lo son, la cita corre a cargo del delegado de seguridad -representante de la Policía- que trabaja con el club que juega en casa.

En este caso, la reunión no se convocó. El representante de la Policía en el Atlético, según ha podido saber la SER, informó del bajo riesgo del encuentro durante el descanso del partido que el equipo rojiblanco disputó el 26 de noviembre ante el Olympiacos en la Liga de Campeones. Ahí se quedó todo el trabajo previo de seguridad.

Esa también pudo ser una de las razones por las que los indicios denunciados por la Policía de La Coruña, que informaba del posible desplazamiento de ultras del Deportivo, no se tuvo en consideración antes de la disputa del encuentro del Vicente Calderón.