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La maldición navideña de las estrellas de la música

Grandes nombres de la música han muerto el día de Navidad

Dean Martin, Eartha Kitt, James Brown y George Michael / CADENA SER

La música está repleta de leyendas, de maldiciones, de curiosidades sorprendentes. Está el Club de los 27, los músicos que han fallecido con 27 años, también existe la maldición de los aviones, el gran números de artistas que han perdido la vida en accidentes de avión, o la maldición de la jota, los cantantes muertos cuyo nombre o apellido empieza por esa letra: Jim Morrison, Janis Joplin, Jimi Hendrix, Brian Jones. Pero quizá la más extraña de todas las leyendas sea la maldición del día de Navidad: la sorprendente lista de grandes nombres que han muerto el 25 de diciembre.

Las vacaciones de Navidad son fechas especiales, días para estar en familia, para reunirse, para reencontrarse, pero las vacaciones de diciembre son también fechas especialmente difíciles para los músicos. No solo porque las vacaciones les obliguen a descansar -son fechas en las que no suele haber grandes actuaciones- también porque revisando la hemeroteca choca descubrir el gran número de artistas de renombre que han fallecido el día de Navidad, una especie de maldición que se ha cobrado la vida de grandes nombres de todos los géneros y épocas.

Uno de los primeros grandes artistas en dejarnos en Navidad fue Johnny Ace, un artista de Memphis, miembro de la banda de gospel The Beale Streeters, que fue creada por B.B. King, Bobby Bland y Earl Forest. Ace tuvo una carrera corta, murió la Navidad de 1954, tras cinco años en activo, pero Ace tuvo un fabuloso año de 1954, llegó a tener ocho éxitos ese año, y falleció tras dispararse en la cara con una pistola que pensaba que estaba descargada mientras jugaba a la ruleta rusa. Toda una pérdida de uno de los artistas más prometedores de la primera mitad de los años cincuenta.

También falleció en Navidad uno de los grandes nombres de los cincuenta. El 25 de diciembre de 1995 nos dejó Dean Martin, mítico actor, cantante y humorista, compañero de risas y copas de Frank Sinatra, Dino fue uno de los personajes más queridos del Rat Pack, habitual de las veladas de Las Vegas y autor de grandes canciones que forman parte del recuerdo colectivo de la América de aquellos años.

La Navidad no ha sido buena para los músicos, pero también ha afectado a artistas de otros ámbitos, un 25 de diciembre murió Charles Chaplin, en 1977, o por mirar a España, Joan Miro, el pintor y escultor catalán, que falleció en 1983.

Quizá la muerte más recordada es la de James Brown. El padrino del soul, e inventor del funk, nos dejó en la Navidad de 2006. James Brown, uno de los músicos más importantes de todos los tiempos, falleció a los 73 años tras una vida intensa y apasionante. Brown fue el gran nombre de la música negra y su legado son cientos de canciones que influyeron a miles de artistas que han mantenido vivo su nombre.

Dos años después se fue otra gran estrella. En la Navidad de 2008 falleció Eartha Kitt, mujer de enorme talento y vida complicada que llegó a interpretar a Cat Woman y cuya muerte provocó que su obra fuese revisada y reeditada. El legado de Kitt abarca cine y música, música que pasa del jazz al blues, los villancicos y temas cantados en varios idiomas. Eartha Kitt falleció a los 81 años y su increíble voz se mantiene en el recuerdo de miles de seguidores.

Aunque la muerte más triste sucedió en las navidades de 2009, cuando Vic Chesnutt se quitó la vida. El músico estadounidense de folk, que a los 18 años sufrió un accidente que le condenó a una silla de ruedas, se suicidó el 25 de diciembre de 2009 acosado por las deudas sanitarias que había contraído y por una profunda depresión. La muerte de Chesnutt, un músico de tremenda sensibilidad artística, fue un duro golpe para sus compañeros de profesión que vieron como un mal giro del destino puede condenar a un artista de tanto talento como Chesnutt, cuya figura sería recordada años después por Lambchop en el espléndido ‘Mr M’, un disco tributo que recuerda la figura de su amigo.

Este año la muerte ha golpeado duramente al mundo de la música. El 2016 comenzó con la muerte de David Bowie y siguió con una larga lista: Cohen, Prince, Sharon Jones o Manolo Tena. Pero la muerte guardaba una última carta para estas fechas. En Nochebuena nos dejó Rick Parfitt, guitarrista de la banda británica Status Quo, que ha muerto a los 68 en un hospital de Marbella tras sufrir una "grave infección”. Y en Navidad, George Michael, el cantante de Londres ha fallecido a los 53 años alargando y manteniendo viva esta tétrica maldición, la maldición musical de la Navidad, la larga lista de grandes nombres de la música que se marcharon un 25 de diciembre.

 
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